LA HUELGA DE 1919 EN TEBA Y CAMPILLOS

 


Los años que transcurrieron entre 1913 y 1917, fueron testigos de la quiebra del sistema de relaciones parlamentarias que se había desarrollado en los primeros tres lustros de la Restauración. En dicho sistema, el partido Conservador y el partido Liberal ejercieron un monopolio secuencial en el acceso al Gobierno y en la obtención de mayorías en las Cortes, mientras que los demás partidos se tuvieron que conformar con una pequeña representación en éstas, donde ocuparon una posición marginal.

El gobierno constituido por Eduardo Dato en octubre de 1913 se tuvo que enfrentar a una nueva situación parlamentaria, debido a la escisión provocada por Antonio Maura. Por vez primera en la Restauración, un Gobierno no tenía el control absoluto del Congreso. Dato consciente del daño producido al partido Conservador por la escisión “maurista”, intentó realizar una política de alianzas que le concediera un cierto margen de maniobra para poder gobernar.

Tras las elecciones de marzo de 1914, el espacio político del antiguo partido Conservador aparece ocupado por tres grupos liderados por Antonio Maura, Juan de la Cierva y Eduardo Dato; y el espacio político del antiguo partido Liberal por los grupos de Manuel García Prieto y el conde de Romanones. Dos de ellos, los liderados por Dato y Romanones, se consideraban herederos de los viejos partidos de la Restauración, y se creían con derecho a proseguir con el monopolio del acceso al Gobierno.

El conflicto que se produjo entre Gobierno y Parlamento, bloqueó la labor de ambas instituciones. Los gobiernos se mostraban incapaces de hacer aprobar los proyectos que remitían a las Cortes. Estas, a su vez, no cumplían su función legislativa, en un momento en el que se exigían decisiones urgentes para solventar las tensiones que la Primera Guerra Mundial estaba generando en la sociedad y en la economía española.

A partir de 1917, España entró en un período de crisis profunda que afectó a todos los ámbitos: al económico, social, político e ideológico. El choque institucional provocó un vacío de poder que facilitó los distintos asaltos a la legalidad vigente acaecidos ese año, y sirvió de justificación para los mismos.

Tres grandes movimientos fueron a confluir en el objetivo de derribar al gobierno:

·         Crisis en el ejército. Entre 1916 y 1917 se crean en España las Juntas de Defensa formadas por oficiales no conformes con el sistema de ascensos por méritos que privilegiaba a los oficiales africanistas (los que estaban en la Guerra de Marruecos) y por los bajos sueldos. En el Manifiesto de las Juntas del 1 de junio de 1917 se daba un ultimátum al gobierno para que aceptara sus reivindicaciones profesionales y económicas. La presión de los militares obligó al gobierno a ceder.

·         Crisis política. El cierre del Congreso por parte de Eduardo Dato y la suspensión de la Constitución, provocó en julio la convocatoria en Barcelona de una Asamblea de Parlamentarios, en la que participan nacionalistas, liberales, republicanos y socialistas. Solicitan un cambio de gobierno y la elección de unas Cortes Constituyentes. El gobierno detuvo a los participantes de la Asamblea.

·         Crisis socio-económica. El hambre producida por el alza de precios, la falta de algunos productos básicos y las fortunas producidas por la especulación, habían acrecentado las tensiones en algunas zonas campesinas y obreras. En marzo de 1917, la UGT desencadenó una serie de huelgas, y el 27 de este mes sus líderes y los de la CNT publicaron un manifiesto en el que se declaraban partidarios de una huelga general contra el gobierno. La respuesta de éste fue la suspensión de las garantías constitucionales.

Los sindicatos convocaron una huelga ferroviaria para el día 10 de agosto, que se convirtió en una huelga general en toda España, en protesta por el alza de precios, por el hambre y la especulación. En las ciudades pequeñas y las zonas rurales la huelga no tuvo apenas repercusión.

El gobierno respondió a la huelga sacando al ejército a la calle, provocando un enfrentamiento con los piquetes en el que hubo numerosos muertos, heridos y detenidos.

El miedo a una revolución obrera motivó el abandono de las Juntas de Defensa de sus reivindicaciones, y el fin de la revuelta parlamentaria. La oligarquía, el ejército y el gobierno se unieron contra la Revolución social.

Las organizaciones obreras españolas, demostraron con esa huelga, que representaban en el país una fuerza social que habría que tener muy en cuenta en lo sucesivo.

En octubre de 1917 se produjo la  Revolución Bolchevique en Rusia. Esa acción de los trabajadores españoles fue, como se ve, anterior a la de los bolcheviques. Sin embargo, la Revolución de Octubre y la toma del poder por la clase obrera rusa, representó para la clase obrera española, un hecho fascinante y un modelo a seguir.

A diferencia de la rusa, la huelga española no tuvo como fin apoderarse del poder e implantar un régimen socialista; los trabajadores y sus dirigentes eran conscientes de la realidad del país de aquella época, la cual no era propicia para la toma del poder. Solo buscaban conseguir que los derechos y condiciones de la clase obrera fuesen respetados y mejorados.

LA CRISIS ECONÓMICA

Como ya vimos en la Crónica «EL CACIQUISMO Y LOS MOVIMIENTOS OBREROS A PRINCIPIOS DEL SIGLO XX», esos años fueron nuevamente testigos del problema del hambre en toda España. Hambre y miseria que marcaron la vida de las clases obreras andaluzas. Los orígenes de tal situación podemos sintetizarlos en la existencia de una crisis irreversible del sistema político de la Restauración, agudizada por las repercusiones de la Primera Guerra Mundial en las estructuras económicas y sociales.

https://cronicasdelvientosolano.blogspot.com/2023/06/el-caciquismo-y-los-movimientos-obreros.html

El resultado de todo ello fue la aparición de un proceso inflacionario que afectó con especial intensidad a la población asalariada, puesto que las alzas en los precios de los artículos de consumo básicos, no se vio compensada por incrementos en los niveles salariales, que permanecieron estancados al nivel de preguerra.

En los pueblos, los precios de los artículos de primera necesidad casi se duplicaron en cinco años. El kilo de pan de trigo pasó de las 0,44 pesetas en 1915 a las 0,86 en 1920, el de patatas se elevó de las 0,17 pesetas a las 0,30; el de garbanzos lo hizo de las 0,91 pesetas a las 1,49; mientras que el de carne de vaca pasó de las 1,84 pesetas a las 3,56 entre las mismas fechas.

A todo esto, hay que sumar la pandemia de gripe que hubo entre 1918 y 1920, en la que España fue uno de los países europeos más afectados con cerca de 8 millones de personas infectadas en mayo de 1918 y más de 200.000 muertos.

Esto, junto a otros factores, provocó la radicalización y una oleada reivindicativa de los trabajadores andaluces, que se extendió entre mayo de 1918 y junio de 1920, bajo la sombra de la Revolución rusa del año anterior.

Fue un movimiento huelguístico de extraordinaria intensidad, pero de carácter puramente reformista, no revolucionario, orientado a la consecución de mejoras concretas e inmediatas en las condiciones de trabajo y el nivel de vida de los obreros.

De las veintidós huelgas convocadas en la provincia de Málaga durante el trienio 1918-1920, las más relevantes fueron la de Cuevas del Becerro en julio de 1918, y en donde el PSOE contaba con dos concejales desde las municipales de noviembre de 1915; las de Antequera en septiembre-noviembre de 1918 y en enero de 1919; la de Campillos en junio de 1919; la de Teba, que tuvo lugar al mismo tiempo y por las mismas causas. De estas dos últimas, me ocuparé a continuación.

SUSPENSIÓN DE LAS GARANTÍAS CONSTITUCIONALES

El 24 de marzo de 1919 el presidente del Consejo de Ministros, conde de Romanones, decreta la suspensión de las Garantías Constitucionales en todo el Reino de España. Esta medida surgió a raíz de la huelga general que estalló en Barcelona, y a la agitación existente en el campo andaluz.

Una huelga general en Barcelona, que según el Gobierno, realizada “sin fundamento alguno atendible ni siquiera alegado, con voluntario olvido de toda prevención legal, cuyo alcance excede indudablemente de la consecución de mejoras en la situación del proletariado y amenaza con graves peligros el orden público. […] Síntomas de intranquilidad iniciados en diversos puntos de España evidencian que la perturbación que se produce en Barcelona puede extenderse…”


Se ordenó la clausura de los centros obreros, también de la Casas del Pueblo, y se prohibieron todas las reuniones de trabajadores. Fueron detenidos y encarcelados varios miembros pertenecientes a las directivas de las sociedades obreras, y se dio orden de practicar otras numerosas detenciones.

La Casas del Pueblo además de su función política y sindical para articular los intereses de los trabajadores, fueron un espacio de encuentro donde las clases obreras pudieron satisfacer sus inquietudes culturales, educativas y de ocio.

El 27 de marzo de 1919, siguiendo órdenes del ministro de Gobernación (Amalio Gimeno y Cabañas), el Gobernador civil de Málaga (José María Gastón y Pujadas) mandó un telegrama a los alcaldes de la provincia, disponiendo que se procediese a la clausura de las sociedades obreras, que se cachease a la gente sospechosa y que se depositasen en la Casa Cuartel de la Guardia civil las armas que se recogiesen y las que tuviesen en sus establecimientos los armeros.

MÁLAGA, 14. —La policía sigue una campaña arbitraria contra el movimiento obrero. Siempre que algún Sindicato se reúne, una legión de agentes nos molesta pidiendo relaciones de nombres y domicilios de los compañeros que forman las Juntas directivas.

Esto da motivo a constantes incidentes, de los que son únicos responsables los policías; pero, además de no ser legal ese procedimiento, en el Gobierno civil están los oficios que dan toda esa clase de datos.

19190415 01 El Socialista

Como denunciara pocos meses después el dirigente socialista cordobés Francisco Zafra, la falta de escrúpulos de las autoridades y la torpeza «criminal» de la burguesía le estaban llevando a «cometer toda clase de fechorías» en su afán por destruir la organización obrera.

El decreto que suspendía las Garantías Constitucionales fue parcialmente derogado, para las elecciones de mayo 1919, enero 1920 y diciembre 1920, con el fin de garantizar el derecho de reunión mientras durasen las campañas electorales.

Las Garantías Constitucionales, fueron restablecidas tres años más tarde, el 30 de marzo de 1922 por el gobierno de José Sánchez Guerra.

INCIDENTE MORTAL EN TEBA

El 26 de marzo de 1919, el alcalde de Teba se negó a conceder ayudas a los trabajadores que estaban en paro, por entender que la crisis de trabajo que alegaban, no era verdadera. Se produjo un fuerte alboroto en las puertas del ayuntamiento, de resultas del cual resultó herido, falleciendo después, el jefe de policía Manuel Anaya Moriel, que había ocupado la presidencia de la sociedad «Adelante» desde su fundación hasta el verano de 1910 (19190328 03 El Regional)

Según participa la guardia civil de Teba, la tarde anterior, el joven de 22 años, Diego García Pérez, en estado de embriaguez, y con motivo de negarse aquel Ayuntamiento a facilitar socorros a los obreros, promovió un fuerte escándalo frente al casino de aquella localidad, donde se encontraba el alcalde Manuel Moriel y el jefe de Policía Manuel Anaya Moriel.

Diego, después de dirigir toda clase de insultos a dichas autoridades, trató de agredirlas, provisto de una navaja.

En ese momento acudió gran número de personas, produciéndose un tumulto de donde partieron tres disparos, resultando el policía con una herida cortante en la cabeza y otra de arma de fuego en el mismo sitio, con rotura del cráneo, cuyas lesiones fueron calificadas de pronóstico muy grave.

Además resultó el vecino Francisco Corral Guerrero, de 34 años, con otra herida contundente en la cabeza, producida por una piedra.

Han sido detenidos Diego García y un hermano suyo, llamado Antonio, de 24 años, ocupándosele al primero una navaja de grandes dimensiones, y al segundo una pistola de dos cañones.

Dichos sujetos, confesos de ser los autores de los sucesos desarrollados, han sido ingresados en la cárcel.

Añade la guardia civil, que lo ocurrido ha sido preparado por el Centro Obrero, y por temor a que se reproduzcan, por estar los ánimos muy excitados, han sido concentrados en dicho pueblo, siete guardias de los puestos de Almargen y Peñarrubia.

19190328 04 EL POPULAR

Ante esta acusación realizada por la Guardia civil hacia el Centro Obrero, la directiva de la Sociedad de obreros agrícolas «Adelante» de Teba, escribió, un par de días más tarde, una carta al diario El Popular, dando su versión de los hechos ocurridos.

Los hechos, en su estricta verdad, fueron los siguientes: Existiendo en el pueblo gran crisis de trabajo y bastante malestar por la carestía de las subsistencias, se vieron los trabajadores en la necesidad de nombrar una comisión el día 26 por la mañana para que gestionase del alcalde trabajo o socorro, con el fin de solucionar el conflicto del hambre. Dicha comisión, compuesta de cuatro individuos, fue a hablar con el alcalde acerca de lo antes mencionado, y aquél contestó «que no había tal hambre, —sin duda porque él no la sufre—y que lo que se quería era perturbar el orden».

En vista de esta mala respuesta, los comisionados fueron a dar conocimiento al señor teniente de la guardia civil de lo pedido al alcalde y de lo que contestó éste. El teniente en el acto escribió una denuncia al señor Gobernador civil de la provincia, oficiándole al propio tiempo al alcalde para que buscara una solución a la crisis de trabajo que dicha comisión gestionaba, retirándose ésta acto seguido en buena forma, yéndose los cuatro individuos a sus casas.

Es, por consiguiente falso todo lo de discusión acalorada con el alcalde. Todo lo que queda relatado ocurrió por la mañana, mientras que el suceso sangriento, en el que para nada intervinieron los obreros, y que provocó el mismo alcalde, ocurrió por la tarde. Fue, este suceso un hecho aislado, cometido por un individuo que se hallaba embriagado, que no tuvo nada que ver con la comisión de los trabajadores, que no era numerosa; ni hubo varias autoridades heridas, pues sólo fue herido el jefe de policía; ni es cierto que interviniera la guardia civil, pues cuando acudió ya habla ocurrido el hecho, que parece ser que fue del modo siguiente: un individuo en estado de embriaguez empezó a tirar piedras al Círculo de Labradores donde se reúne el cacique, diciendo aquel individuo en alta voz que el pueblo tenía hambre. En el momento llegaron su padre, un hermano y un primo, que lo sujetaron para llevárselo de aquel sitio. En esto se presentó el alcalde acompañado del jefe de policía y éste, haciendo uso del revólver, disparó sobre el muchacho, por orden del alcalde quien con otro revólver apuntaba también. A los disparos del jefe de policía, que no dio ninguno, el individuo en cuestión se abalanzó sobre él, hiriéndole con arma blanca.

Esto fue lo ocurrido, en lo que no tuvo participación alguna la sociedad obrera.

Que la culpa de todo la tuvo el alcalde se desprende de la forma en que ocurrió el suceso. Si a la familia del sujeto que estaba embriagado se la hubiera dejado llevárselo de allí como quería hacer, poniendo para ello todo cuanto estaba de su parte, y no hubieran salido el alcalde y el jefe de policía en la forma provocadora que lo hicieron, seguramente no ocurre nada.

19190330 02 EL POPULAR

En Teba, donde ocurrieron la semana pasada lamentables sucesos por la falta de tacto de las autoridades locales, existe profundo malestar, no sólo entre las clases jornaleras a consecuencia de la escasez de trabajo, sino entre los labradores, cosecheros e industriales con motivo de la duplicidad de tributos a los vinos y alcoholes, los cuales han sido gravados a la vez con patentes y arbitrio de cinco y diez pesetas por hectólitro respectivamente.

Los interesados reclamaron ante este Gobernador civil, pero se nos dice que el escrito fue enviado a informe de la Comisión provincial y que ésta aun no ha dictaminado.

Entre tanto, parece que aquel Ayuntamiento se prepone cobrar los dos tributos desde el día de ayer, y como ello implicaría una grave responsabilidad, no dudamos que el señor Gastón y Pujadas (Gobernador civil) sabrá exigirla en ese caso y pasar el asunto a los tribunales.

19190402 02 EL POPULAR

HUELGA EN CAMPILLOS

Pocos días después de haber ocurrido estos sucesos en Teba, se inició una huelga en Campillos, en este caso por las actuaciones del administrador de las fincas del alcalde Salvador Hinojosa Carvajal, contra los obreros:

Campillos, 12.—El preceder indigno del encargado Lorenzo Gallardo, que viene haciendo objeto de malos tratos a los obreros que explota el patrono D. Salvador Hinojosa, ha dado motivo a que surja la protesta de los trabajadores del campo reclamando que sea despedido el encargado que ha producido el conflicto.

El patrono se ha negado a imponer este correctivo al encargado aludido, dando motivo con esta actitud al planteamiento de la huelga general de los campesinos de esta localidad.

Con este motivo se han extremado las precauciones, reconcentrándose fuerzas de la guardia civil.

19190413 02 El Socialista

Hay que recordar que Salvador Hinojosa estuvo de alcalde de Campillos desde el 1 de enero de 1914, hasta el 1 de abril de 1920

MÁLAGA, 13. — La huelga de los obreros agrícolas de Campillos continúa sin resolver.

El gobernador ha ordenado a las autoridades municipales que intervengan en la solución de este conflicto.

Los huelguistas declaran que no volverán trabajo mientras el alcalde Hinojosa no despida al administrador del cortijo de ¿Trabales? (debe haber un error en el nombre).

19190414 01 El Socialista

La huelga que los obreros agrícolas de Campillos han sostenido contra el administrador o mayordomo del alcalde del referido pueblo, ha terminado satisfactoriamente a favor de los obreros, con el despido del aludido administrador.

El movimiento huelguístico iniciado por los agricultores, tuvo su repercusión, en cuanto a solidaridad prestada a estos por las fuerzas productoras del mencionado pueblo, tales como criadas, gañanes y amas de cría, los cuales abandonaron sus habituales ocupaciones, uniéndose al movimiento que en justicia habían planteado los campesinos.

Inmediatamente que tuvo noticia la Federación local de agricultores del planteamiento de la huelga y causas que la motivaban, informó al Comité de la Unión General de Trabajadores, el cual, de una manera eficaz, puso en autos al ministro de lo que en dicho pueblo sucedía, y medios que se consideraban precisos para su solución en evitación de ulteriores consecuencias, que muy bien pudieran derivarse por la prolongación del conflicto.

Debido a la energía demostrada por los obreros de Campillos, al defender sus derechos, y la no menos elogiada actividad y celo de la Federación local de agricultores, en unión del Comité de la Unión General de Trabajadores, se debe la rápida solución del mencionado litigio.

19190416 02 El Popular

Con un triunfo resonante, ha terminado la huelga de campesinos de Campillos, de la cual ya dimos una referencia telegráfica hace unos días.

Surgió el conflicto como protesta contra el trato despótico que a los obreros daba el administrador general de las fincas y tierras del alcalde de este pueblo.

El paro fue secundado con absoluta unanimidad por todos los trabajadores de Campillos, incluso los mozos del servicio doméstico, que se unieron a los labriegos para reclamar el inmediato despido del administrador causante del conflicto.

El alcalde patrono se opuso en un principio a despedir a su administrador, alegando la excusa de que tenía que entregarle antes las cuentas.

Rechazada esta oferta del alcalde, continuó la huelga con mayor intensidad si cabe, teniendo los patronos y sus familias que dedicarse al cuidado de cerdos y demás clase de ganado.

Se recurrió al gobernador de la provincia, quien se declaró impotente para intervenir en la cuestión, manifestando que no podía obligar a que se realizara inmediatamente el despido del administrador aludido.

Dos días después los patronos declararon que no podían resistir más en la situación planteada por los trabajadores, a los que rogaban volvieran al trabajo, aceptando ellos previamente todas las condiciones impuestas por los huelguistas, incluso, por lo tanto, el despido del citado administrador.

De esta manera ha terminado la huelga de los campesinos de Campillos cuya organización de resistencia está integrada por la totalidad de aquellos trabajadores del campo, adheridos colectivamente a la Unión General de Trabajadores.

19190418 02 El Socialista

APERTURA DEL CENTRO OBRERO DE TEBA

El 13 de abril de 1919, siguiendo órdenes del Gobernador civil, el alcalde de Teba decreta la reapertura del Centro obrero de la sociedad “Adelante”, que había sido clausurado, al igual que todas los de la provincia, por la suspensión de las Garantías Constitucionales.

TEBA.- El día 14 del actual se realizó la reapertura de nuestro Centro Obrero. Por la noche acudió al local social gran número de trabajadores.

El compañero Gómez dio lectura al acta de reapertura, y (José) Escalante hizo uso de la palabra para demostrar que la organización es ya indestructible, pues a pesar de los procedimientos a que han recurrido las autoridades locales con sus mentiras, patrañas y calumnias, acerca de los compañeros de la Asociación es cada día más pujante en este pueblo.

En tres meses han ingresado en nuestras filas más de 800 compañeros, se ha adquirido en propiedad la Casa del Pueblo (Grande nº 37), y se ha hecho sentir la fuerza de la organización, con un boicot a un pequeño caciquillo que en la pasada huelga de Campillos se prestó a actuar de esquirol.

La solidaridad y el espíritu de asociación son una realidad entre los trabajadores de esta provincia.

19190418 02 EL SOCIALISTA

Sin embargo, el Centro Obrero de Campillos permaneció cerrado, y así estuvo durante más de tres años, sin que los requerimientos para su apertura, como ya veremos, ante las autoridades locales, el gobernador civil de Málaga, el Gobierno, e incluso ante el Congreso de los Diputados surtiera efecto.

EL PROBLEMA AGRARIO EN ANDALUCIA

Antes de adentrarme en la descripción de los conflictos que se dieron entre los trabajadores del campo y los propietarios de las tierras, quiero hacer una exposición de cómo era la forma de trabajo en el campo andaluz. Y para ello, nada mejor que hacer un extracto del artículo que publicaron en el periódico El Sol en mayo de 1919, unos ingenieros agrónomos del Servicio Catastral de Sevilla

Entre el personal que trabaja en estas explotaciones, podemos distinguir dos clases: una, la constituida por los obreros fijos, gañanes y encargados de la custodia del ganado, los cuales viven en el caserío de la finca, alejados de sus familias, y su vida social está limitada a una periódica visita a la población en ciertos días festivos. Sus salarios oscilan actualmente entre 1,25 y 2,25 pesetas, más la alimentación, valorada en 1,25 pesetas, y consistente, por regla general, en pan, aceite y legumbres.

La otra clase, más numerosa, es la de jornaleros eventuales. Estos viven en el pueblo y trabajan como temporeros, desplazándose mientras duran las faenas que los ocupan a los cortijos o ranchos, donde se albergan muchas veces en condiciones de hacinamiento francamente insoportables. Por esta razón, y por el atractivo de la familia, prefieren ir y volver diariamente al tajo, y como suelen salir del pueblo a las nueve de la mañana, para estar de vuelta a la puesta del sol, la duración de la jornada efectiva es de cuatro a cinco horas solamente en invierno, y poco mayor en otras épocas, excluyendo los descansos de comidas y cigarros.

El rendimiento del trabajo de estos obreros, con semejante sistema, es muy exiguo, por hacerse, además, generalmente sin el empleo de maquinas y carecer de estímulo hacia la eficacia de las operaciones que realizan, a causa de no estar interesados en la producción. Así resulta que los patronos suprimen en lo posible las operaciones que, siendo muy convenientes, no son imprescindibles, aunque por este modo de obrar sacrifiquen una buena parte de la cosecha.

La ocupación de estos trabajadores temporeros es intermitente durante el año, sujetándose a las necesidades de los cultivos; cuentan con trabajo en las épocas de recolección de aceitunas, siembra y recolección de cereales y alguna otra más; pero, aparte de esas temporadas, su empleo es inseguro, pudiéndose calcular entre los días lluviosos y aquellos en que no hay faenas en el campo, una cuarta parte, por lo menos, del año, de paro forzoso.

Las utilidades que obtienen con sus jornales, excepción hecha de las épocas de recolección, son insuficientes para atender a las necesidades de la familia, viéndose por ello impelidos a ocupar también a las mujeres y los niños en ciertas faenas, como la escarda y algunas recolecciones. La situación de esta clase de trabajadores agrícolas es considerada, no sin razón, como la más agobiante de todas, pues la inseguridad del jornal es causa de un ayuno casi completo en los días de paro. Por otra parte, el empleo de las mujeres y niños en algunas operaciones es cosa verdaderamente lamentable, pues algunas de aquéllas son madres que tienen que abandonar a sus pequeños durante muchas horas, en ciertos casos aun en períodos de crianza, y los niños abandonan su instrucción por ir al trabajo.

19190521 y 23 El Sol

HUELGAS EN TEBA Y CAMPILLOS

En los primeros días de mayo de 1919, la sociedad “Adelante” presentó unas Bases de trabajo (lo que hoy conocemos como Convenio a nivel local) con las que pretendían regular todos los aspectos relacionados con las tareas agrícolas, desde la supresión del destajo hasta la fijación de la jornada laboral, pasando por el descanso dominical y la conclusión de las faenas a las cuatro de la tarde. Igualmente, en las mismas, se rechazaba la contratación de trabajadores forasteros mientras existieran en el pueblo obreros en paro, y en caso de que fueran necesarios, trabajarían en igualdad de condiciones que los nativos, actuando el Centro obrero como interlocutor de los mismos.

Cuando empezó la temporada de verano, los obreros organizados de esta localidad, según acuerdos adoptados en la Federación Agrícola Provincial (marzo de 1919), tuvieron que presentar a los labradores, unas bases reglamentando las condiciones del trabajo y fijando al mismo tiempo jornales mínimos, […] más bien modestas que exageradas, y así lo han reconocido algunos patronos mismos.

Para tratar del asunto tuvo que partir de Teba una comisión de obreros a visitar al entonces Gobernador de Málaga, señor (Policiano) Maestre, y estando en dicha capital don Diego Durán, residente en Málaga y labrador de este término, no tuvo inconveniente alguno en acompañar a dicha comisión de obreros al Gobierno civil, donde dicho señor Durán expresó estar conforme con las bases.

Y entonces el mismo Gobernador ofició a este Ayuntamiento con instrucciones, para que en este pueblo se constituyera un Comité paritario de obreros y patronos que estableciera definitivamente las bases dentro de la legalidad, bases que quedaron convenidas según consta en actas de dicho Comité.

19190701 02 EL POPULAR

El 29 de mayo, se reunía dicho Comité paritario en el Ayuntamiento de Teba, para discutir sobre las bases que unos y otros presentaban. Fueron discutidas y se acordó por unanimidad, aceptar íntegramente las propuestas por los obreros, de todo lo cual se levantó acta certificada por el secretario del Ayuntamiento, y por los patronos y obreros

Las nuevas condiciones, aceptadas por ambas partes, mantenían la supresión del destajo; fijaban la conclusión de la jornada laboral antes de que cayera la noche; establecían que los “trilleros” se ocuparían del arreglo del pajar y, finalmente, concedían al personal de las máquinas trilladoras dos horas y media de descanso para comer.

Sin embargo, cuando apenas habían transcurrido unos días, los propietarios decidían romper el acuerdo, alegando que existía una mala fe en el trabajo, y que los obreros no querían trabajar. A partir de ese momento dejaron de contratar a los obreros del pueblo, y comienzan a traer para realizar las labores de siega a trabajadores forasteros.

Y ahora ocurre que, estando aceptado todo lo antes expuesto por parte de patrones y obreros, debieron seguidamente haber dado trabajo a los obreros de aquí, pero desgraciadamente no lo hacen así y no se concibe que, siendo estos obreros por demás aptos para las labores que aquí se efectúan, se recurra a traer obreros forasteros permaneciendo la gran mayoría de los de Teba sin colocación; y excusado es decir la situación que están cruzando estos humildes trabajadores y que les ha obligado a ir a los cortijos a invitar pacíficamente a los forasteros a abandonar este término, a lo que accedieron sin oposición alguna, en vista de las razonables manifestaciones que estos les hicieran, si bien triste es añadir que los patronos de aquí se burlan de leyes, de acuerdos y de todo, persistiendo en la actitud que tan equivocadamente adoptaron a última hora.

Para conseguir sus fines alegan los patronos que temen revueltas, no obstante seguir los obreros en actitud pacífica, y hacen traer aquí infinidad de guardia civil, no sé en prevención de qué clase de sucesos.

De continuar las cosas como van, darán lugar a una justificadísima huelga, con lo que se perjudicarían grandemente los intereses generales de este pueblo que, como todos, solo desea trabajar.

19190701 02 EL POPULAR

Los patronos argumentaban que la crisis de trabajo en otras industrias, había llevado a ir a trabajar al campo a muchos obreros que desconocen este y sus faenas, y que sin embargo, exigen el mismo jornal que los trabajadores experimentados, y eso es un absurdo que perjudica incluso a los verdaderos obreros agrícolas.

No se negaban “a pagar un buen jornal cuando se nos remunera en trabajo. Lo que no podemos hacer, es pagar jornales altos por escasas horas de trabajo, y que éste se realice de mala gana y en ocasiones por personal incapacitado, que se nos impone, y que perjudica más que beneficia las faenas agrícolas”.

Así fue transcurriendo el tiempo, y el día 27 de junio, la comisión de obreros citó a los patronos, reuniéndose la junta, y exponiendo éstos que se segara por fanegas de tierra, basándose en la mala fe que afirmaban existir en los obreros. Los obreros no admitieron la siega por fanegas de tierra y pidieron que se respetara el contrato firmado.

Los patronos lo rechazaron todo, y finalmente, tras no llegar a ningún acuerdo, el 30 de junio de 1919, los obreros del campo de Teba van a la huelga, con el apoyo de trabajadores de otros sectores. Se hizo un paro unánime en el campo inclusive los ganaderos, que abandonaron el ganado; todo el pueblo se solidarizó al movimiento.

Igualmente ocurrió en Campillos donde se declaró la huelga por el desencuentro entre los obreros agrícolas y la patronal sobre las Bases pactadas

Los obreros agrícolas de Campillos han anunciado declararse en huelga. El gobernador les ha indicado la conveniencia de que sometan a un tribunal arbitral los obreros y los patronos las diferencias surgidas, buscando una solución.

19190530 016 La Vanguardia

LA HUELGA GENERAL EN CAMPILLOS Y TEBA

Según las noticias recibidas ayer en el Gobierno civil, los obreros agrícolas de los pueblos de Campillos y Teba, han vuelto abandonar los trabajos de la recolección, por estimar que no se cumplen las bases pactadas últimamente con la clase patronal.

Con tal motivo en los pueblos se ha declarado la huelga general, secundada por la mayoría de los gremios.

Las diferencias existentes entre obreros y patronos agrícolas, consisten principalmente en la admisión de obreros que no viven en la localidad y en el deseo de los patronos de que se fije el número de jornales que se ha de invertir en segar cada fanega de tierra.

No obstante el número importante de obreros que se encuentran en huelga, hasta ahora la tranquilidad en Campillos y Teba, es completa, reinando el orden más absoluto.

19190702 03 El Regional

Desde los partidos republicanos de Málaga se mostró también su apoyo a los obreros agrícolas de Teba y Campillos.

El ex diputado a Cortes señor Pedro Gómez Chaix visitó ayer al Gobernador civil para hacerle entrega de una exposición de numerosos contribuyentes de Teba, en la que solicitan la intervención de la primera autoridad civil en el conflicto allí planteado por la actitud de los patronos, no admitiendo para las labores agrícolas a obreros de la localidad y por incumplimiento de las bases y acuerdos convenidos con éstos.

19190704 02 El Popular

A los pocos días, la huelga empezó a tornarse violenta, cuando en Campillos, algunos trabajadores agrícolas realizaron actos de sabotaje, tales como el incendio de algunos sembrados de trigo, y destrucciones de aparatos agrícolas y útiles de labranza.

Ante este hecho, el Juzgado de Instrucción de Campillos, decretó el procesamiento y prisión contra la Junta directiva de la Sociedad Obrera “El 1º de Mayo”, como inductora de estos actos contra la propiedad ajena.

El Secretario del Gobierno civil comunicó ayer tarde a los periodistas, que el juez de instrucción de Campillos había ordenado la prisión de la Junta directiva del Centro obrero de dicho pueblo, por considerar a sus miembros complicados en los incendios de mieses, registrados estos últimos días y cuyas pérdidas ascienden a 6.000 pesetas.

19190706 01 El Popular

LA DE CAMPILLOS Y TEBA

Sigue en igual estado el conflicto planteado por los obreros agrícolas de Campillos y Teba, sin que hasta la fecha haya sido posible encontrar una solución, que armonice el deseo de ambas partes.

No obstante afirmarse oficialmente, que en dicho pueblo reina la más completa tranquilidad, informes particulares nos aseguran haber gran marejada entre los trabajadores, que les ha llevado a realizar algunos actos de sabotaje, tales como quema de partes de trigo y destrucciones de aparatos agrícolas y útiles de labranza.

Ayer se recibió en el Gobierno civil, una orden del Ministerio de Fomento, a fin de que salga para los expresados pueblos el ingeniero jefe del Servicio Agronómico de la provincia, interviniendo personalmente en las soluciones de las huelgas planteadas.

Con tal motivo suspendió su viaje, el oficial del Gobierno civil don Fernando Benavides, que había recibido delegación del gobernador con el mismo fin.

Entre las fincas donde ha habido fuego figura una haza de trigo del cortijo denominado «Tendero», del término de Teba propiedad de don Enrique Hinojosa.

Según nuestros informes el incendio fue de escasa importancia, pues sólo ardieron unas 15 hectáreas.

19190705 02 El Regional

EL INGENIERO AGRÓNOMO

Ayer salió para los pueblos donde existen declaradas huelgas agrícolas, el ingeniero jefe del Servicio Agronómico de la provincia, delegado especial del Ministerio de Fomento y del Gobernador civil, para intervenir directamente en la solución de los conflictos.

19190706 01 El Regional

LA DE CAMPILLOS

En este pueblo la agitación obrera aumenta cada día, habiéndose registrado, como ya decíamos ayer, algunos actos de sabotaje, entre ellos el incendio de varios sembrados.

Como confirmación de estas noticias que recibimos por conducto particular, ayer se nos dijo en el Gobierno civil que el Juzgado de Instrucción del partido, haya decretado el procesamiento y prisión contra la Junta directiva de la sociedad obrera de aquel pueblo, como inductora de actos contra la propiedad ajena, de los penados por la ley.

También sabemos que el alcalde (Salvador Hinojosa) ofició al Gobierno civil, comunicando que durante la madrugada del 2 al 3 del actual se hablan registrado varían incendios, produciendo unas pérdidas que se pueden calcular en seis mil pesetas.

19190706 01 El Regional

El alcalde de Teba intentó reunir a la comisión paritaria para poder solucionar el conflicto, pero se encontró con la negativa de los patronos. Alegaban, que al haber sido abandonados los cortijos por los obreros, no se atrevían a salir de los mismos, y se veían en la necesidad de estar constantemente vigilándolos.

LA LLEGADA DE LARGO CABALLERO A TEBA

El viernes 4 de julio, Francisco Largo Caballero, ex diputado y secretario general de la UGT, salía de viaje desde Madrid hacia La Línea, Algeciras, Gibraltar, Puente Genil, Lucena y Córdoba, a arreglar cuestiones de trabajo”.

Cuando llegó a Bobadilla, en dirección a La Línea y Gibraltar, se encontró con un grupo numeroso de obreros de Teba, que le pidieron que les acompañase, pues en el pueblo el capitán de la guardia civil les exigía que volviesen al trabajo.

Al principio se negó, teniendo en cuenta que en La Línea y Gibraltar ya tenían preparados los actos que habrían de celebrarse a su llegada. Sin embargo, al ver la insistencia de sus compañeros, y tan grave le presentaron la situación, que Largo Caballero decidió quedarse en Teba el sábado 5 de julio, hasta el domingo 6.

Largo Caballero

Al llegar al pueblo, supo que el capitán de la Guardia civil había citado en el Ayuntamiento a una reunión, a las nueve de la noche, a unos cuarenta obreros de los más ancianos, con el propósito de obligarles a firmar la vuelta al trabajo. Largo Caballero aconsejó que no fuera ninguno, y en su lugar fue él mismo, acompañado de cinco compañeros del Comité paritario.

Después de una larga discusión, que presenció el delegado del gobernador civil de Málaga, se retiraron sin llegar a un acuerdo con los patronos, que claramente manifestaron “que no cumplían el contrato porque no les convenía, y que se les denunciara si querían”.

A las dos de la madrugada, y al salir de la reunión, Largo Caballero remitió el siguiente telegrama al ministro de Fomento y al gobernador civil:

«Ministro Fomento, Madrid. —A pesar intervención imparcial delegado gobernador, los patronos niéganse a cumplir contrato de trabajo, so pretexto de que algunos obreros no trabajan lo suficiente. Esto último lo niegan los obreros y pueblo de Teba en masa. Sin embargo, representación obrera está dispuesta a que Comité paritario resuelva estos casos de justicia. Los patronos no aceptan.

Patronos proponen para resolver conflicto se cobre por obreros 22,50 pesetas por fanega (con alimentación, 27 sin ella). Esto sería restablecer trabajo destajo suprimido en contrato firmado por ambas partes en el mes de Mayo.

Capitán guardia civil afirma tiene órdenes para que se siegue, sea como sea. Esto no es posible si patronos no cumplen contrato de trabajo o se atropella derecho de los obreros.

Ruego a V. B. que para evitar desagradables consecuencias para todos, ordene rápidamente sea cumplido contrato trabajo, y que, en cumplimiento real decreto, el Comité paritario funcione para resolver incidentes que surjan en trabajos de recolección. — Francisco Largo Caballero.»

19190711 01 El Socialista

19190708 y 09 El Regional

La tarde del lunes 7 de julio, ante el cariz que tomaban los acontecimientos, al secundar el paro otros gremios de trabajadores (por ejemplo, los barberos se negaban a prestar sus servicios a los patronos agrarios, afeitando únicamente a los obreros huelguistas), el capitán de la Guardia civil, proclamaba el estado de guerra, y procedió a clausurar de nuevo el Centro obrero “Adelante”.

Con órdenes severas para todos los establecimientos, y se publicó por bando y corneta, estando tomadas las bocacalles por la guardia civil y las salidas del pueblo al campo, necesitándose un permiso del capitán de la guardia civil para salir al campo, órdenes bastante severas contra estos humildes obreros y el pueblo en general.

19190712 04 El Popular

Las huelgas de Teba y de Campillos continúan sin resolverse, habiendo resultado infructuosas las gestiones realizadas por el jefe del servicio agronómico de esta provincia, señor Cañete.

Continúa haciendo las labores el personal forastero, vigilado por la guardia civil.

19190709 011 La Vanguardia

Continuamos con el relato de Francisco Largo Caballero:

El domingo 6 de julio, salí para Algeciras, La Línea y Gibraltar, celebrándose los actos anunciados con mucha gente y entusiasmo.

El martes (8) volví a Teba, y al llegar me entero de que se ha declarado el estado de guerra y se ha clausurado el Centro obrero.

Al llegar yo a la plaza, un teniente de la guardia civil me ordena le acompañe a la fonda, donde el capitán ha instalado el cuartel general.

En el acto fui detenido e incomunicado y, a la hora de salida del primer tren, se me expulsó, sin haber podido cambiar una palabra con los compañeros.

19190711 01 El Socialista

El día 8, el gobernador civil recibió un telegrama del capitán de la guardia civil que se encontraba en Teba, manifestándole que el alcalde había presentado la dimisión, por la situación tan difícil por la que atravesaba el pueblo. El gobernador no se la admitió y le ordenó que volviera a encargarse inmediatamente del mando
19190709 y 10 El Regional

LA HUELGA DE TEBA SE AGRAVA.

MALAGA 9 (0,5 m.).—En el pueblo de Teba se ha agravado considerablemente la huelga de obreros del campo. En vista de ello, se ha dispuesto la salida de fuerzas de la Guardia civil, al mando de un teniente coronel.

Se calcula que hay sin segar unas noventa mil fanegas.

19190709 09 El Sol

En Campillos, sin embargo la huelga se solucionó. Se llegó a un acuerdo entre los patronos y los obreros, incorporándose los huelguistas al trabajo.

Según comunica el ingeniero jefe del Servicio Agronómico, como resultado de la Junta Paritaria celebrada, se ha solucionado la huelga agrícola de Campillos, trabajando la mayoría de los obreros.

19190710 01 El Popular

Los obreros contaron con la solidaridad prestada por los trabajadores de la provincia, que a mediados de mes habían recaudado casi 300 pesetas. Entre otras, estaba la sociedad “La Convencedora” de Cuevas del Becerro y “La Sabora” de Cañete la Real.

FEDERACION AGRICOLA PROVINCIAL

Málaga 9 de Julio de 1919.

La Federación Agrícola Provincial, a las sociedades obreras agrícolas de la provincia y a las de la capital.

Estimados compañeros: En Teba se han declarado en huelga los compañeros de aquella Sociedad; los motivos son el haberse negado los patronos a dar cumplimiento a las bases de trabajo que tenían acordadas.

Aprovechándose la clase patronal de que en la actualidad el Gobierno que nos rige es sumamente reaccionario y que está entregado incondicionalmente a la defensa de los privilegios de la clase capitalista, les han declarado el boicot a los compañeros asociados, con el propósito de destruir su organización rindiéndoles por hambre y a fuerza de cometer atropellos, no regateando procedimiento de ninguna clase, desde la declaración del estado de guerra hasta poner la fuerza pública para que cometa toda clase de desmanes con nuestros compañeros.

Ante esa actitud, ellos se niegan a trabajar en esas condiciones, a fin de que los patronos cumplan las bases que con anticipación tenían acordadas.

Por efecto de prolongarse esta lucha y agotárseles los recursos y antes que sucumbir por hambre, este Comité provincial, pide a todas las sociedades obreras de la provincia y a las de la capital, les presten la solidaridad material enviándoles cuantos recursos les sea posible, a nombre de Juan Cortés, presidente de la Sociedad de Obreros agrícolas “Adelante”, Teba.

Quedamos vuestros y de la causa obrera.

Por el Comité Provincial, el Secretario, José Molina.

Vº Bº el Presidente, Pedro Puerta.

19190710 04 El Popular

El capitán de la guardia civil de Teba, informaba al gobernador civil, el marqués de Velilla de Ebro (José María Jordán de Urríes), que existía una tranquilidad aparente en el pueblo, en cuanto al orden público se refiere, y que para los trabajos de siega se habían utilizado doscientos obreros forasteros, esperándose la llegada de otros tantos, que encontrarán ocupación en las demás faenas agrícolas. 
19190710 01 El Popular

El día 9 de julio apareció otro edicto del capitán de la Guardia civil, suspendiendo el Estado de guerra.

La directiva de la Sociedad de obreros agrícolas «Adelante», viendo que el problema de la huelga estaba enquistado, decidió mandar una comisión compuesta por José Escalante, Antonio Anaya Rodríguez y Juan Cortés Maldonado, éste último presidente de la Sociedad, a entrevistarse con el gobernador civil, el marqués de Velilla de Ebro, y denunciar “los abusos y arbitrariedades que las autoridades cometen en la lucha que sostienen los obreros para el libre desenvolvimiento del derecho”.

En el tren de la mañana llegó a Málaga una comisión del pueblo de Teba. […] Los comisionados nos dicen, que para circular por el campo se precisa un salvoconducto del capitán de la guardia civil, firmado por dicho señor; sin este requisito no se puede circular. Respecto a los que notoriamente son conocidos por pertenecer a la sociedad, la autoridad indicada se niega a facilitarles esos pases de circulación.

Nos hablan de otros atropellos, vejámenes y demás, que prueban los desafueros que las autoridades cometen con estos labriegos que, en uso de un perfecto derecho, tratan de mejorar su pésima condición.

19190711 01 El Popular

El gobernador civil, volvió a enviar a Teba al ingeniero jefe del Servicio Agronómico, señor Cañete, para retomar el diálogo entre las partes

Ayer, en el tren de las doce y media, marchó al vecino pueblo de Teba, el ingeniero jefe del servicio agronómico, para continuar sus gestiones cerca de los obreros huelguistas y ver la manera de solucionar el conflicto

19190712 02 El Popular

En una carta que la directiva de la Sociedad obrera agrícola “Adelante”, envía al diario El Popular, se empieza a notar una cierta amargura y un claro sabor a derrota, dicen:

La huelga de Teba sigue sin resolver, pues tanto el delegado enviado por el ministerio de Fomento como el del Gobernador de la provincia, están puestos al servicio del cacique, porque es una vergüenza y una lástima que un pueblo como este, tan noble y tan humilde, tenga que estar emigrando, pues en dos días han salido más de 500 hombres a buscar la vida por otro lado, que no sabemos lo que será de ellos, mientras aquí dentro de su propio pueblo se le ha dado el trabajo a 600 o 700 forasteros que hay de esquiroles, y esto no lo hacen los caciques porque sientan ventaja de una peseta, pues si fuera así estarían en su derecho, que lo hacen tan solo por rendir al obrero de Teba por hambre, para ver si con esto descuaja los ánimos de la organización.

[…]

Está comprendido perfectamente que ni autoridades, ni caciques, ponen de su parte para solucionar el conflicto, dando lugar con esto a crear un espíritu de odio que otro día traerá graves consecuencias.

Hemos visto palpablemente que las propias autoridades están empeñadas en que así ocurra, pues el señor delegado del Gobierno, jefe del servicio agronómico de la provincia, que ha venido dos veces a buscar una base de arreglo, no ha hecho nada, porque esta última vez que vino llegó muy fuerte y al momento se aplacó […]

El Gobernador que prometió a la comisión que fue a visitarlo, tomar carta en el asunto, tampoco ha cumplido su palabra, así que se está conociendo que todos están empeñados en destruir la organización y en matar el pueblo de Teba, […]

19190718 01 y 02 El Popular

El gobernador civil de Málaga, marqués de Velilla de Ebro, que había sido nombrado para el cargo hacía escasamente un mes (Gaceta del 20 de junio), presentó su dimisión.

El secretario particular del gobernador, comunicó ayer tarde a los periodistas que el marqués de Velilla de Ebro había presentado la dimisión.

19190718 01 El Popular

A primeros de agosto, cuando la huelga llevaba en curso un mes, y los trabajos de siega y recolección realizados por trabajadores forasteros, continuaban sin pausa con la protección de las fuerzas de la guardia civil, se publicó en el diario El Popular, un artículo titulado «DESDE TEBA», en el que se veía que ya daban la huelga por perdida.

Se tolera que trabajadores forasteros sigan haciendo las faenas, al objeto de reducir a los obreros al hambre y a la miseria, y de esta suerte opten por ingresar en las filas de un Sindicato de defensa agraria que estos buenos caciques, en el intermedio de la huelga, han inventado, para poder pescar incautos, cosa difícil por cierto, pues estos obreros han conocido el juego y dicen que ya es tarde. […]

A tal objeto, prometen dichos caciques, que por hoy, hasta hacer la recolección, emplearán algunos asociados, pero, terminada esta, el que quiera trabajar en Teba, ha de entregar el Reglamento de socio del Centro Obrero y apuntarse al Sindicato por ellos creado.

19190802 04 El Popular

Definitivamente, los trabajos en el campo finalizaron con la derrota de los obreros agrícolas de Teba, que vieron como la cosecha de cereal se realizaba con mano de obra forastera, y sin que los patronos respetaran las Bases de trabajo previamente firmadas, y todo ello con la pasividad cómplice de las autoridades provinciales. 

Hubo que esperar hasta la mañana del 16 de noviembre de 1919, para que fuera autorizada la reapertura del Centro Obrero de Teba, que se llevó a cabo en presencia de Jesús Gómez Guerrero y de Manuel Bueno Fontalba, a quienes como miembros de la Junta Directiva de la Sociedad se les hizo entrega de los enseres y de las llaves del Centro.

Sin embargo, para la apertura del Centro Obrero de Campillos, hubo que esperar unos cuantos años más.

EL CENTRO OBRERO DE CAMPILLOS

El Centro Obrero de Campillos, se clausuró en marzo de 1919, cuando el presidente del Consejo de Ministros, conde de Romanones, decretó la suspensión de las Garantías Constitucionales en toda España. Ese día se ordenó la clausura de todos los Centros obreros, incluso de la Casas del Pueblo y se prohibieron todas las reuniones obreras.

El caso de Campillos, se vio agravado por la detención y el procesamiento de la Junta directiva de la Sociedad Obrera “El 1º de Mayo”, corno inductora de los actos de sabotaje que se produjeron durante la huelga del mes de junio de 1919, tales como el incendio de algunos sembrados de trigo, y destrucción de aparatos agrícolas y útiles de labranza.

En el Congreso de los Diputados, el socialista Andrés Saborit preguntó, en la sesión del 31 de diciembre de 1919 al ministro de Gobernación Joaquín Fernández Prida, del partido Conservador, sobre algunos Centros obreros que aun permanecían cerrados.

Señor Ministro de la Gobernación, a propósito de Centros obreros cerrados, todavía quedan algunos que lo están gubernativamente. En el distrito de Campillos, provincia de Málaga, están desde luego el de Campillos, el de Cártama y el de Peñarrubia, […]

En marzo de 1920, durante el Congreso de la Federación Agrícola de la provincia de Málaga, Se dio lectura a una carta de la sociedad “El 1º de Mayo” de Campillos, que con 1.100 federados, no pudo enviar un delegado a dicho Congreso por tener el Centro clausurado desde hacía más de un año.

El 1 de abril de 1920, volvía a ser nombrado alcalde de Campillos, José María Hinojosa Carvajal

Ese mismo mes, era la UGT la que reclamaba la apertura de los Centros Obreros de Campillos, Casarabonela y otros

19200403 04 La Libertad.

Eran tres los Centros Obreros clausurados en la comarca: Campillos, Cañete y Peñarrubia.

El 20 de julio de 1920, la Casa del Pueblo de Madrid envió a varios de sus miembros al ministerio de la Gobernación para que protestasen contra el cierre del Centro obrero de Campillos. Por esas fechas era ministro Francisco Bergamín García, que había sido diputado en el Congreso por el distrito de Campillos desde abril de 1886 hasta marzo de 1914. 


Al tener noticias de los propósitos que traían los comisionados de la Casa del Pueblo de Madrid, dijo a un grupo de periodistas con los que estaba departiendo:

—Pero ¿qué piensan esos señores? —preguntó—. Se cerró un Centro que había allí y que perturbaba a los obreros. Desde entonces reina allí la paz. Todo el mundo está contento y nadie reclama, y se ha fundado otro Centro obrero que tiene encantada a la gente. No sé si será cosa de pedir a estos comisionados los poderes de la representación que invocan. Pero lo que hay en el fondo es que ven que se les marcha la parroquia.

19200720 y 21 LA VOZ

Tras las elecciones generales del 19 de diciembre de 1920, es elegido diputado por el distrito de Campillos, Fabio Bergamín Gutiérrez, hijo primogénito de Francisco Bergamín. Ya lo había sido con anterioridad desde abril de 1916 hasta mayo de 1919, justo un mes antes que se iniciaran las huelgas de junio de 1919 en Teba y Campillos.

En esas elecciones, los socialistas de Málaga y del distrito de Campillos, decidieron presentar como candidato por dicho distrito a Antonio Fabra Ribas, un catalán que era vocal de la Comisión Ejecutiva del PSOE y director de El Socialista. Su candidatura, fue un fracaso.

Antonio Fabra Ribas

El 11 de mayo de 1922, de nuevo el socialista Andrés Saborit, preguntaba en el Congreso de los Diputados, al ministro de Gobernación, que ahora era Vicente de Piniés, sobre el cierre de Centros Obreros

En relación con la política a seguir por el Gobierno con los Centros obreros y Sociedades obreras, a que ayer me refería en una interrupción que hice a S. S. cuando contestaba al Sr. Prieto, he de rogarle que despache lo antes que pueda, o estudie lo antes que pueda, las reclamaciones para la reapertura de algunos Centros obreros, entre ellos (ya los he citado alguna vez) Campillos, Peñarrubia, Puebla de Cazalla, Nueva Carteya y otros, casi todos en Andalucía.

Son clausuras que en la otra etapa, cuando las garantías estaban en vigor, no pudimos conseguir casi nunca que se levantaran para que esos Centros funcionasen.

Son Centros obreros socialistas, son Centros obreros que hacen política local; no son de tendencias anarquistas; había de serlo, y nosotros defenderíamos igualmente su funcionamiento, como se ha dicho antes, dentro de la ley; pero es que, además, son Centros qué hacen labor política, que quieren intervenir en la vida municipal, y por eso, porque molestan localmente al alcalde y a los caciques locales, es por lo que se les ponen dificultades.

Andrés Saborit Colomer

Mes y medio más tarde, el 27 de junio de 1922, de nuevo Andrés Saborit preguntaba en el Congreso al mismo ministro de la Gobernación, sobre el cierre del Centro Obrero de Campillos.

¿Qué pasa en Campillos, Sr. Ministro de la Gobernación? ¿Cuántas veces habrá que pedírselo a S. S.? ¿En qué tono, de qué manera? ¿Qué clase de súplicas quiere S. S. que le hagamos? ¿Qué pasa en Campillos, que yo he hablado al Diputado por el distrito, al Sr. Bergamín, a S. S., he escrito al alcalde, al gobernador de Málaga, y no hay posibilidad de que se abra aquel Centro?

¿Qué pasa en Campillos? Pues no pasa nada. No pasa más sino que hay quien cree que basta abanderarse en el grupo de un político que tenga influencia, para que, a despecho de las órdenes que ese político dé, y contrariando las propias inclinaciones que en la política nacional ese político tenga, se considere amparado para cometer los mayores atropellos.

Este es el caso de Campillos, Sr. Ministro de la Gobernación; y lo que sucede en Campillos ocurre también en todo el distrito electoral de Campillos, en Peñarrubia, en Cañete la Real y en los pueblos de alrededor, y aun podríamos agregar que en lo que respecta a esa política caciquil de no consentir que las órdenes de su señoría se cumplan, levantando la clausura de los Centros Obreros, es Andalucía la excepción; no Andalucía en términos generales, porque no he recibido protestas de Córdoba, ni de Granada, pero sí de Sevilla y Málaga, de donde tenemos protestas concretas; por ejemplo, el caso de Puebla de Cazalla, donde ocurre lo mismo que, en Campillos, y otros que no cito por no abusar de la bondad de la Cámara y de la Presidencia, pero que S. S, conoce.

Los doy por reiterados, y tenga S. S. la bondad de ordenar que se cumpla la ley, a fin de que esos Centros Obreros puedan funcionar.

Andrés Saborit, continuó ese día con su requerimiento ante el Parlamento:

Yo no he sabido cómo enfocar la cuestión en este caso concreto del Centro obrero de una población; intervención directa por carta cerca del alcalde; el alcalde que no hace caso, que contesta muy finamente, pero que no hace caso; intervención cerca del señor gobernador civil: "No faltaba más; el Centro obrero se abrirá". Y pasa el tiempo, y no se abre el Centro obrero. Visita a S. S., cartas a S. S.; S. S. que dice que se hará justicia, se enterará; se informará, y no se abre el Centro obrero; conversaciones privadas con los Diputados que representan estos distritos, exposición de hechos, para que se enteren, para que se informen, para que averigüen, para que corrijan, y no se corrigen los hechos; reclamaciones directas al jefe político que representa esa política, y no se atienden. ¡Yo no sé qué tendré que hacer!

Este es el caso, señor ministro de la Gobernación; ¿qué tenemos que hacer nosotros para que se abra el Centro obrero de Campillos y el de Puebla de Cazalla, cuando conocemos que hay señores con influencia que dicen allí: "Es inútil, no se abrirá, y si se abre procuraremos formarles en seguida a aquellos elementos obreros un proceso para encarcelarles”?

¡Si conocemos ya, y S. S. también la conoce, esta actitud de resistencia de esos elementos locales! Por cuestión de política local, ¿podemos nosotros allanarnos, ni S. S. ni nosotros, a esta pretensión obcecada, que puede dar lugar a casos verdaderamente intolerables? Esta es la cuestión.

DIARIO DE SESIONES DEL 27 DE JUNIO DE 1922

En septiembre (14 y 28) y octubre (13 y 26) de 1922, el jerezano Juan Bello Ruiz, escribió varios artículos desde el periódico El Socialista, con los títulos «EL CACIQUISMO EN EL DISTRITO DE CAMPILLOS», y «PARA EL SEÑOR PINIÉS». En ellos pedía la apertura de los Centros obreros de Campillos, Cañete y Peñarrubia, de cuyo cierre hacía responsable a la familia Bergamín. Según él, los Centros estaban cerrados como venganza electoral caciquil, por la presentación de la candidatura de Antonio Fabra Ribas en las pasadas elecciones.

Unos meses más tarde, el 23 de marzo de 1923, desde el periódico El Socialista, de nuevo Juan Bello se dirigía en un escrito al entonces ministro de la Gobernación, Martín Rosales Martel:

Excelentísimo señor: Con fecha 30 del pasado enero le decía vuecencia al diputado a Cortes por Oviedo, Andrés Saborit, lo siguiente:

«Recibo su carta, y hoy mismo trato de averiguar lo que haya ocurrido con respecto a la Sociedad de Obreros Agricultores de Teba. Lo mismo hago respecto de los Centros Obreros que me dice continúan cerrados en el distrito de Campillos, para proceder en justicia, como es siempre mi constante aspiración.»

Pues ha transcurrido casi todo el mes de febrero, y los Centros Obreros de Campillos, Cañete la Real y Peñarrubia continúan clausurados. Y en cuanto a los obreros de Teba, tienen el Centro abierto; pero aquellas autoridades les prohíben penetrar en él a más de tres.

De derecho está constituida la Sociedad de Obreros Agrícolas de Teba, registrada en el Gobierno civil; pero de hecho está suprimida por la voluntad arbitraria de aquellas autoridades locales, que colocan a la puerta del Centro a los agentes de la autoridad con el deliberado y maligno propósito de que los obreros se indignen y los arrollen. Desean echar a presidio a unos cuantos padres de familia por atentado a la guardia civil o municipal, y a otros cuantos al cementerio, a fin de aterrorizar a los demás.

Es sistema de gobierno del diputado señor Estrada, que es el que inspira esa política criminal, que motivó la muerte del jefe de policía hace unos dos años y que estén en la cárcel dos obreros honrados. Pero quieren más carne para el presidio y para el cementerio los subordinados de vuecencia en los pueblos de Teba, Campillos, Cañete y Peñarrubia.

Se le ha denunciado al señor gobernador civil, por escrito y verbal, la conducta de las autoridades de Teba. Se le ha hecho comprender hasta dónde llegan en su provocación, y no hemos sido atendidos.

Por el diputado Andrés Saborit se le denuncia a vuecencia, y las cosas siguen igual. ¿Son indiscutibles estas autoridades? ¿Qué es lo que se quiere?

Pues pase lo que pase, los obreros no renunciarán a sus derechos políticos y sociales.

Y no nos cansaremos en nuestra ya larga campaña, que recopilamos para nuestra defensa, por lo que pueda ocurrir el día de mañana.

Nos estamos cargando de razón. Y que conste una vez más que los provocados son los obreros de Teba una y otra vez, diariamente.

Y nada más por hoy, señor ministro de la Gobernación. Veremos cuándo se justifica que «proceder en justicia es siempre su constante aspiración».

Juan Bello

Málaga, febrero 1923.

 19230223 02 El Socialista.

LA DICTADURA DE PRIMO DE RIVERA

Con la llegada de la Dictadura del general Primo de Rivera, el 13 de septiembre de 1923, se suspendieron las garantías constitucionales, se declaró el estado de guerra y se procedió a destituir de golpe a todos los gobernadores civiles de las provincias, sustituyéndolos por los gobernadores militares.

Mediante Real Decreto de 30 de septiembre también se cesó a todos los concejales de los ayuntamientos, sustituyéndolos por juntas de vocales, que serían los encargados de elegir al alcalde y al resto de cargos municipales.

Justo en aquellos momentos, la Sociedad de Obreros Agrícolas de Campillos renovó su Junta Directiva, quedando constituida en la siguiente forma:

Presidente, José Llamas Padilla; vicepresidente, Francisco Oliva González; secretario, Juan Velasco Olmo; vicesecretario, Pedro Caro Padilla; tesorero, Cristóbal Romero Olmo; contador, Marcelino Gallardo Valencia (reelegido); vocales: Fernando Royan Río, Alonso Bermudo Franco e Ignacio Valencia García.

19230930 002 La Libertad

En Campillos, el 2 de octubre de 1923, es nombrado alcalde Juan Moreno Cuellar. Solo duraría en el cargo cinco meses. Fue el fin de la saga de los Hinojosa Carvajal, que ocuparon la alcaldía de Campillos durante casi un cuarto de siglo.

A los pocos días, el 2 de octubre de 1923, ante la presidencia del capitán de la Guardia Civil, Don Antonio Fernández Álvarez, toma posesión de nuestra Alcaldía Don Juan Moreno Cuellar. (Baltasar Peña Hinojosa – Página 115)

Como ya vimos en la Crónica «EL CACIQUISMO Y LOS MOVIMIENTOS OBREROS A PRINCIPIOS DEL SIGLO XX. SEGUNDA PARTE», poco después del golpe de 1923, Primo de Rivera consiguió atraer al partido Socialista y a la Unión General de Trabajadores para colaborar con la dictadura. 

El 1 de octubre de 1923, a la semana del golpe militar, Primo de Rivera entró en contacto con Manuel Llaneza, alcalde de Mieres, jefe de los mineros del carbón de la UGT. El general aseguró a su interlocutor que su gobierno respetaría todas las ventajas sociales conseguidas por los obreros. La dictadura apoyaría a la clase obrera, promulgando leyes en su favor. Llaneza, al salir, dijo a la prensa «No hay nada que temer». El PSOE y la UGT aceptaron colaborar totalmente con el dictador.

https://cronicasdelvientosolano.blogspot.com/2023/07/el-caciquismo-y-los-movimientos-obreros.html

Baltasar Peña, en las página 115 y 116 de «Pequeña historia de la villa de Campillos», dice:

El apartamiento de las tareas municipales de las personas que hasta esta fecha se ocuparon de la política local, motivó en un principio una cierta hostilidad hacia el nuevo régimen, por parte de todos aquellos que se sentían desplazados del mando; por el contrario el elemento obrero, agrupado compactamente en el centro socialista «El 1º de Mayo», acogió con agrado esta modificación.

No se perturbó con ello la pacífica y rutinaria vida de los campilleros. El mantenimiento del principio de autoridad y el inflexible respeto a la Ley que preconizaba el nuevo régimen, dio como consecuencia inmediata una garantía esperanzadora, que pronto habría de ser confirmada en la mayor seguridad y tranquilidad en el campo.

En el mes de noviembre, se celebró en el Ayuntamiento la primera sesión municipal en la que se invitó a hacer uso al público asistente, del derecho que le concedió al R. D. de 14 de octubre para expresar sus quejas y peticiones. Se buscaba con ello excitar el interés de los vecinos en la administración pública.

El primer campillero que hizo uso de estos derechos fue Anselmo Govantes Pineda, quien formuló dos quejas: que se reparara el puente de tablas sobre el arroyo del Rincón, en el camino a la estación del ferrocarril, y que no se acumularan basuras en la calle Real ni en la de Enmedio.

El 11 de enero otro vecino, Antonio Romero Valencia, destacada figura del socialismo, solicitaba textualmente «que de un modo sólido se exprese sí se han vendido terrenos comunales de este Municipio y si su importe ha sido ingresado en las arcas municipales». Creemos que el pedir esto de un modo sólido lo haría pensando en la liquidación.

A estas dos modestas intervenciones, y alguna otra de la misma clase, quedó reducida la colaboración ciudadana campillera, que la disposición ministerial reseñada apetecía y deseaba.

BALTASAR PEÑA HINOJOSA

El 26 de febrero de 1924, el gobernador militar de Málaga, general Enrique Cano Ortega, visita Campillos:

Málaga 26, 5 tarde. El gobernador militar, ha estado en el pueblo de Campillos, visitando el Ayuntamiento. Lo esperaban numerosas personas de todas las clases sociales.

El gobernador pronunció un discurso, en que dirigió un llamamiento a los hombres amantes de la justicia, de la moral y del orden, diciendo que están obligados a cooperar a la actuación del Directorio.

Anunció la creación de Juntas o Asociaciones patrióticas, del seno de las cuales saldrán los encargados de la administración provincial y local, siempre que sean honrados y amantes del orden.

Dijo también que tendrán protección todos los intereses sociales.

19240227 014 ABC

Pocos días después de la visita del gobernador militar, se vuelve a producir un nuevo cambio en la alcaldía de Campillos. Así lo cuenta Baltasar Peña en la página 116:

El 8 de marzo de 1924 y ante el Delegado Gubernativo, Don José María Picatoste y Vega, que luego durante muchos años ostentaría la Jefatura de Frontera en la Línea de la Concepción, ocupaba la Alcaldía Don Antonio Palop Campos, cuya gestión nada tuvo que destacar.

El 11 de marzo de 1924, los afiliados del Centro Obrero, que por fin había sido abierto, publicaron el siguiente manifiesto:

D. Marcelino Gallardo Valencia como Presidente en funciones del Centro Obrero «1º de Mayo» de esta Villa, manifiesta el incondicional apoyo a la corporación para el buen gobernar, y pide se transmita al Sr. Gobernador estos términos, así como la satisfacción por ser una Corporación que los aleja del temor de intromisión caciquil.

MISCELÁNEA CAMPILLERA – Página 342 – Ildefonso Felguera

Campillos, 3 - 8 mañana. El nuevo Ayuntamiento ha quedado constituido por los siguientes señores (19240406 011 ABC):

  • D. Antonio Palop Casasola Propietario
  • D. Juan Campos Pérez Propietario
  • D. Juan Rueda Jiménez Comerciante
  • D. Andrés Guerrero Martin Labrador
  • D. Juan Gallegos Martín Propietario
  • D. José Sánchez Molina Banquero
  • D. Cristóbal Padilla Sánchez Comerciante
  • D. Antonio Cuellar Labrador
  • D. Manuel Enríquez Pangusión Comerciante
  • D. Marcos Rueda Obrero
  • D. José Sánchez Obrero
  • D. Antonio Llamas Cuellar Labrador

El 21 de diciembre de 1924 fue nombrado alcalde de Campillos Juan Gallegos Cuellar. Sobre su labor al frente del Ayuntamiento, ya escribí la Crónica «LA OBRA DE JUAN GALLEGOS CUELLAR»

https://cronicasdelvientosolano.blogspot.com/2022/08/la-obra-de-juan-gallegos-cuellar.html


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