EL GRUPO ESCOLAR «MANZANO JIMÉNEZ»



La ley educativa que estaba en vigor en los primeros años del siglo XX, era la ley Moyano, aprobada en septiembre de 1857, durante el reinado de Isabel II. En dicha ley, se estructuraba el sistema educativo en Primera Enseñanza, Segunda Enseñanza y Enseñanza Superior.

La Primera Enseñanza se dividía en Elemental y Superior. La Enseñanza Elemental era obligatoria entre los seis y los nueve años, y gratuita para los que no pudieran pagarla. Los estudios no estaban sujetos a un determinado número de cursos.

Para el paso a la Segunda Enseñanza se necesitaba tener nueve años cumplidos, haber cursado la Primera Enseñanza Elemental completa y superar un examen. La Segunda Enseñanza se compone de estudios generales y de estudios de aplicación a las profesiones industriales. Estaba dividida en dos períodos de 2 y 4 años. Para pasar de un periodo a otro, había que volver a pasar otro examen. Aprobados los seis cursos podían los alumnos ser admitidos al examen del grado de Bachiller en Artes, que habilitaba para entrar en la Enseñanza Superior, que comprendía los estudios de las Facultades, las enseñanzas superiores y las enseñanzas profesionales.

En dicha ley, se obligaba a los ayuntamientos de más de quinientas almas a dotarse de una escuela de niños y otra de niñas. En los pueblos que lleguen a 2,000 almas debía haber dos Escuelas completas de niños y otras dos de niñas. En los que tuvieran 4,000 almas habrá tres; y así sucesivamente, aumentándose una Escuela de cada sexo por cada 2,000 habitantes, y contándose en este número las Escuelas privadas.

Aunque el Estado controlaba toda la enseñanza, no se ocupaba de financiar más que la enseñanza superior y profesional. La financiación de la primaria corría a cargo de los municipios, que debían incluir en sus presupuestos anuales, como gasto obligatorio, la cantidad necesaria para atender a dicha enseñanza. De la secundaria se ocupaban las autoridades provinciales.

En aquella época, la mayoría de los edificios escolares presentaban una situación de gran dejadez. Eran locales que normalmente no estaban construidos con fines educativos, sin condiciones, ya no solo materiales o espaciales, sino a nivel higiénico. Había escuelas en almacenes abandonados, bodegas, cuadras, palomares. Los ayuntamientos cedían para la escuela aquellos espacios que al pueblo no le servían para otra cosa. En el mejor de los casos, viviendas particulares que eran alquiladas.

Los ayuntamientos veían el mantenimiento de las escuelas como una carga que no les aportaba nada útil, ya que los conocimientos que impartían estaban lejos de las necesidades de los vecinos.

El Diccionario de Pascual Madoz, publicado entre 1846 y 1850, dice que Campillos contaba con "una escuela pública de niños, dotada con 600 reales anuales, y concurrida por más de 120 alumnos; otra privada y frecuentada por unos 30; dos de esta misma clase para las niñas"

Según Federico Manzano Sancho, en 1912, la escuela de Campillos estaba en la calle Santa Ana nº 34, en una casa de propiedad municipal. Pero según la “Miscelánea” de Ildefonso Felguera, estaba en el número 36.

En la carpeta de cuentas de propiedades y derechos de 1928, aparece la Corporación con una casa con 366,66 m2 en calle Santa Ana, 36, dedicado a Escuela Pública. (Página 351)

Es normal la discrepancias de números en las calles, ya que periódicamente se reenumeran para incluir modificaciones habidas en las construcciones de la misma. De esto ha pasado un siglo, y yo pienso, que con la numeración actual, la escuela estaría en lo que hoy es el número 40, donde ahora hay un solar sin edificar.

En 1915, al concederle a la escuela de Campillos un grado más, pasa de tres a cuatro, la escuela de la calle Santa Ana se queda chica, y la trasladan a una casa de la calle Real, esquina con la calle Guzmanes, propiedad de José María Hinojosa Carvajal. Era alcalde su hermano D. Salvador Hinojosa Carvajal, padre del poeta José María Hinojosa Lasarte. Federico Manzano Sancho dice en su Diario:

En 1915, la escuela la han graduado con cuatro grados, y se instala en la calle Real, en casa de D. José Mª Hinojosa que no la habita por ciertos escrúpulos de su mujer Dª Ángela Lacarcel, por el agua del pozo con que la han edificado. Es un buen local y ocupo el 4º grado.

Seis años después la escuela vuelve a trasladarse. Dice Federico Manzano:

1 de septiembre de 1921. D. José María Hinojosa, decide hacer obra en su casa de la calle Real para habilitarla, y en su virtud, las escuelas que en ella están, se trasladan a la Casa Rectoral en calle Guzmanes (nº 29), previa la adaptación que se ha hecho. Hoy empieza el curso en este local.

Las traseras del patio de la escuela en calle Guzmanes, daba al antiguo Cuartel de la Guardia civil, que vino a ocupar las antiguas escuelas de la calle Santa Ana. El cuartel  estuvo en dicho lugar hasta el año 1926, cuando se construyó una Casa cuartel nueva, enfrente de donde hoy está el Parque José María Hinojosa. Ambos patios se comunicaban por una pequeña puerta, con unos escalones, que lo chiquillos de vez en cuando cruzaban.

Francisco Guerrero Berdún, el tío Frasco, que fue alumno en esas escuelas, así me lo contaba. Se comunicaba por el patio con las escuelas públicas de D. Manuel Pardillo Govantes (1904). En el cuartel había siete u ocho casitas que no tenían puertas, tenían cortinas, y cuando se fue la Guardia Civil, se las dieron a familias pobres.

CREACIÓN DE LA OFICINA TÉCNICA DE CONSTRUCCIÓN DE ESCUELAS

Con la creación de la Oficina Técnica de Construcción de Escuelas (R.D de 23 de Noviembre de 1920) se intentó dar un giro a las construcciones de nuevas escuelas. (Gaceta de Madrid del 28 de noviembre de 1920). Era en ese momento ministro de Instrucción Pública, Vicente Cabeza de Vaca y Fernández de Córdova, y presidente del Consejo de ministros, Eduardo Dato del partido conservador.

A través de esta Oficina Técnica, se puso por parte del Estado a disposición de los ayuntamientos, créditos extraordinarios para la creación de nuevas escuelas. Esto constituirá, además de la renovación de los edificios escolares, un paso decisivo para la paulatina mejora de la calidad de la enseñanza.

Hay que decir, que en ningún momento hubo una planificación a nivel nacional de la ubicación de las nuevas escuelas a construir. La expansión de la red escolar pública durante estos años, fue marcada por los municipios, y secundados o acompasados por la acción del Estado, que se limitó a subvencionar aquellos proyectos que llegaban a sus manos.

Según el Real decreto, los ayuntamientos debían proporcionar el solar donde se ubicaría el edificio y realizar una contribución económica que solía rondar entre el 20 y el 25% del presupuesto de obras. También debía incoar el oportuno expediente, donde se debía justificar la necesidad de levantar una nueva escuela en la localidad. Ese expediente, una vez tramitado y aprobado por el Ministerio de Instrucción Pública, aseguraría al municipio el respaldo económico estatal, aunque no garantizaría que la escuela se construyera, pues el ayuntamiento debía encontrar la fórmula para hacer efectiva su aportación económica.

A la hora de ejecutar las obras, el ayuntamiento podía optar bien por acometerla él mismo, bajo la supervisión de su arquitecto municipal, o bien encomendarla al Estado, que a su vez, tras una subasta pública, la adjudicaría a un contratista, quien debía someterse a la dirección de un arquitecto de la Oficina Técnica para Construcción de Escuelas. En ambos casos el promotor de la construcción siempre sería el ayuntamiento.

Los nuevos edificios escolares serían propiedad del Estado. Se crearían también, según el R.D., unas “Juntas económicas de las escuelas, organismo modesto, de esfera de acción reducida, pero del que pueden esperarse grandes resultados, dando intervención, solo en el cuidado del local (nunca en nada que tenga que ver con el régimen y acción pedagógica de la Escuela), no solo a las autoridades y personas más cultas de los pueblos, sino a los padres que tengan en las aulas niños recibiendo instrucción”.

LA DICTADURA DEL GENERAL PRIMO DE RIVERA

Con la llegada de la dictadura del general Miguel Primo de Rivera, en septiembre de 1.923, siendo rey Alfonso XIII, se suspendió la Constitución, se disolvieron los ayuntamientos, se desalojó del poder a la oligarquía de los políticos de turno, se prohibieron los partidos políticos y se declaró el estado de guerra. Además del restablecimiento de la paz social, el objetivo de las nuevas autoridades militares provinciales y locales, era regenerar la vida pública poniendo fin a las redes caciquiles existentes.

Baltasar Peña Hinojosa en su libro “Pequeña Historia de la Villa De Campillos”, dice:

En septiembre de 1923 se hace cargo del Gobierno de nuestra patria, constituyendo un Directorio Militar, el general Don Miguel Primo de Rivera. Anuncia en su primer manifiesto que habrá de variar la estructura política del país, desterrando a los partidos, que desde el tiempo de Cánovas practicaban con mejor o peor acierto el turno pacífico en la Gobernación de nuestra patria. (Página 115)

A nivel de infraestructuras, se dio un gran impulso en la construcción de espacios escolares, incrementando el número de dichos edificios durante este período, hasta enero de 1930, en unas cuatro mil aulas, entre ellas las de Campillos.

En los años veinte se alzaron en España en torno a mil doscientos edificios escolares, en los que tendrían cabida más de cuatro mil aulas. Durante la II República se concluyeron las obras de unos setecientos edificios escolares, con una cifra cercana a las tres mil aulas. Por tanto, el discurso tan extendido y aceptado que encumbra a la República como el régimen político pionero y responsable de una drástica mejora en las infraestructuras escolares debe cuestionarse seriamente. Pilar García Salmerón, «Radiografía de las construcciones escolares públicas en España (1920-1937)»

El directorio militar de Primo de Rivera, a finales de septiembre, hace cesar a los concejales de todos los Ayuntamientos de España (Gaceta del 1 de octubre de 1923), en base a los anhelos del pueblo de “ver sustituidos en las Corporaciones municipales a los hombres, a la vez semilla y fruto de la política partidista y caciquil, que con poca eficacia y escrúpulo venían entorpeciendo la vida administrativa de los pueblos”. También se articulaba un mecanismo para la designación de nuevos alcaldes.

En Campillos, el 2 de octubre de 1923, es nombrado alcalde Juan Moreno Cuellar. Solo duraría en el cargo cinco meses.

A los pocos días, el 2 de octubre de 1923, ante la presidencia del capitán de la Guardia Civil, Don Antonio Fernández Álvarez, toma posesión de nuestra Alcaldía Don Juan Moreno Cuellar. (BPH – Página 115)

Se nombraron también nuevos gobernadores civiles, todos ellos militares, que fueron encargados de investigar los casos de corrupción en sus provincias. Como apoyo a los gobernadores se nombraron en cada Partido judicial, delegados gubernativos, también militares.

En el Partido judicial de Campillos, el 7 de diciembre de 1923, se nombra delegado gubernativo al capitán de Infantería José María Picatoste Vega. (Diario Oficial del Ministerio de la Guerra, del 8 de diciembre).

El apartamiento de las tareas municipales de las personas que hasta esta fecha se ocuparon de la política local, motivó en un principio una cierta hostilidad hacia el nuevo régimen, por parte de todos aquellos que se sentían desplazados del mando; por el contrario el elemento obrero, agrupado compactamente en el centro socialista "1º de Mayo", acogió con agrado esta modificación.

No se perturbó con ello la pacífica y rutinaria vida de los campilleros. El mantenimiento del principio de autoridad y el inflexible respeto a la Ley que preconizaba el nuevo régimen, dio como consecuencia inmediata una garantía esperanzadora, que pronto habría de ser confirmada en la mayor seguridad y tranquilidad en el campo. (BPH - Página 115)

A principios de 1924, comenzó a fraguarse la idea de que no era suficiente para regenerar el país, poner fin a la oligarquía y el caciquismo, sino que también era necesaria una nueva política, que se apoyara en «hombres amantes de la justicia, de la moral y del orden, que están obligados a cooperar a la actuación del Directorio».

Así lo manifestó, el 26 de febrero de 1924, el gobernador militar de Málaga, general Enrique Cano Ortega, en su visita a Campillos:

Málaga 26, 5 tarde. El gobernador militar, ha estado en el pueblo de Campillos, visitando el Ayuntamiento. Lo esperaban numerosas personas de todas las clases sociales.

El gobernador pronunció un discurso, en que dirigió un llamamiento a los hombres amantes de la justicia, de la moral y del orden, diciendo que están obligados a cooperar a la actuación del Directorio.
Anunció la creación de Juntas o Asociaciones patrióticas, del seno de las cuales saldrán los encargados de la administración provincial y local, siempre que sean honrados y amantes del orden.
Dijo también que tendrán protección todos los intereses sociales.
19240227 014 ABC

Así es como nació en abril de 1924 la «Unión Patriótica», un partido gubernamental organizado desde el poder, como partido único del régimen, sustituto de todos los partidos políticos. Un “partido político, pero apolítico, que ejerce una acción político-administrativa”. Fue una fuerza política que se hizo cargo de la administración del Estado llevando a la práctica el lema de “menos política, más administración”. En el partido se integraron personas procedentes de la derecha tradicional católica y de otros sectores conservadores y apolíticos.

Pocos días después de la visita del gobernador militar, se vuelve a producir un nuevo cambio en la alcaldía de Campillos. Así lo cuenta Baltasar Peña:

El 8 de marzo de 1924 y ante el Delegado Gubernativo, Don José María Picatoste y Vega, que luego durante muchos años ostentaría la Jefatura de Frontera en la Línea de la Concepción, ocupaba la Alcaldía Don Antonio Palop Campos, cuya gestión nada tuvo que destacar. (Página 116)

El periódico ABC, del 6 de abril de 1924, publica la composición del nuevo Ayuntamiento

Campillos, 3 - 8 mañana. El nuevo Ayuntamiento ha quedado constituido por los siguientes señores:
D. Antonio Palop Casasola                Propietario
D. Juan Campos Pérez                     Propietario
D. Juan Rueda Jiménez                    Comerciante
D. Andrés Guerrero Martin                 Labrador
D. Juan Gallegos Martín                    Propietario
D. José Sánchez Molina                    Banquero
D. Cristóbal Padilla Sánchez             Comerciante
D. Antonio Cuellar                              Labrador
D. Manuel Enríquez Pangusión         Comerciante
D. Marcos Rueda                               Obrero
D. José Sánchez                                Obrero
D. Antonio Llamas Cuellar                  Labrador
19240406 011 ABC

Según dice Federico Manzano Sancho en su diario, el nombramiento de Antonio Palop Campos, fue debido a la renuncia de asumir el cargo de alcalde realizada por Juan Gallegos Cuellar, hasta que “termine la obra que está haciendo en su casa de calle Real, 30, y no quería encargarse de la alcaldía para que no hablaran las malas lenguas, que con tanta facilidad difamamos, diciendo que hacía la obra con dineros del Ayuntamiento”. Esa misma afirmación la realiza Baltasar Peña en su libro.

El PSOE y la UGT en bloque –salvo Indalecio Prieto y Fernando de los Ríos– colaboraron abiertamente con la dictadura. La figura clave de este entendimiento sería Francisco Largo Caballero que se convirtió en miembro del Consejo de Estado. Los socialistas se convirtieron en socios prioritarios de la dictadura.

El 11 de marzo de 1924, tres días después del nombramiento de Antonio Palop como alcalde, D. Marcelino Gallardo Valencia, como Presidente en funciones del Centro Obrero “1º de Mayo” de esta Villa, manifiesta el incondicional apoyo a la corporación para el buen gobernar, y pide se transmita al Sr. Gobernador estos términos, así como la satisfacción por ser una Corporación que los aleja del temor de intromisión caciquil. (MISCELÁNEA CAMPILLERA, de Ildefonso Felguera – Página 342)

Es de hacer notar la felicitación reflejada en el libro de actas del Centro Obrero, y el ofrecimiento incondicional a los munícipes. Esta organización de la UGT que tan alborozadamente recibió a la Dictadura, habría de ser después su más encarnizado enemigo. (Baltasar Peña – 116)

El 21 de diciembre de 1924, terminada la obra de su casa en la calle Real, fue nombrado alcalde de Campillos Juan Gallegos Cuellar. Por esa fecha tenía 43 años. Estaba casado con Juana María Palop Casasola, hermana del anterior alcalde, Antonio Palop Casasola. Por tanto eran cuñados. No tenían hijos.

Durante la guerra civil, fue detenido el día 23 de julio y asesinado el 3 de agosto de 1936, junto al maestro nacional Rafael Núñez Núñez, a Ramón García Ruiz, cura párroco y a Cecilio Sánchez Molina, presbítero. Con el pretexto de que necesitan tomarles declaración en Antequera, se dirigen por la carretera hasta los terrenos del cortijo de la Alberquilla, en donde los hacen descender del coche, acribillándolos a tiros, y rociándolos con gasolina, prenden fuego a sus cadáveres.

https://verdadhistoricacampillos.blogspot.com/2022/05/declaraciones-de-testigos-fc_49.html 

La gestión de este alcalde y de sus colaboradores dio, un gran impulso al pueblo y lo sacó de su ostracismo y abandono, dejando una profunda huella en nuevas obras y servicios municipales para la villa. Federico Manzano Jiménez era teniente de alcalde y Benito Luna Anoría y Federico Manzano Sancho, concejales en esta corporación

En el último mes de este año se nombra Alcalde a Don Juan Gallego Cuellar, comerciante en su juventud en la Línea, y labrador después, que durante seis años consecutivos de Alcaldía, habría de marcar unas orientaciones decisivas en la vida municipal de nuestro pueblo. Por cierto, que el nombramiento de Sr. Gallego se demoró unos meses a instancias del mismo, por una razón que pudiera parecer nimia, pero que encerraba sin embargo una evidente comprensión de la maledicencia pueblerina. En aquellos meses labrábase una magnífica casa en la calle Real el Sr. Gallego, y no quiso hacerse cargo de la Alcaldía hasta terminar su obra, por temor a que en el mañana algunas lenguas calumniosas, que nunca faltan en todos los sitios, pudieran achacársela a los beneficios que la Alcaldía le hubiera proporcionado. (BPH – 116)

NECESIDAD DE UN NUEVO GRUPO ESCOLAR

En el pleno del 26 de diciembre de 1924, D. Ramón García Ruiz, cura párroco de Campillos, comunicó a la Corporación que el 30 de junio del próximo año (1925) finalizaba el plazo de arrendamiento de la Casa Rectoral de calle Guzmanes (número 29), donde se hallaba la escuela pública, y que para dicha fecha es necesario quede desalojada. (MISCELÁNEA – 343). A pesar de este requerimiento por parte de D. Ramón, el alquiler se mantuvo hasta el 30 de junio de 1930, como ya veremos más adelante.

En ese pleno el teniente de alcalde D. Federico Manzano Jiménez, propuso y así se aprobó, que se gestionase ante el ministerio de Instrucción Pública la construcción de un nuevo Grupo Escolar para niños y niñas con seis aulas cada sección (finalmente serían cinco), en base a lo dispuesto en el R.D de 23 de Noviembre de 1920, sobre Construcción de Escuelas.

Para ello se necesitaba disponer de unos terrenos adecuados, de los que el ayuntamiento carecía, y aportar entre el 20 y 25% del coste de la obra del edificio. En el presupuesto municipal para 1925-26 se aprobó una aportación de quince mil pesetas para este proyecto, cantidad a todas luces insuficiente.

En el pleno municipal del 13 de abril de 1925, se acordó adquirir una parcela de 7.450 m2 a D. Juan Infante Pineda, para construir el Grupo Escolar. Federico Manzano de su bolsillo, anticipó 2.750 pesetas. (MISCELÁNEA – 345)

Federico Manzano Sancho, dice en su Diario sobre este particular:

En todo intervine activamente como concejal que era, pero especialmente en la construcción del Grupo Escolar, inclinando a mi tío, que también era concejal, a que comprara a D. Juan Infante en 7.000 pesetas que pedía por la haza de tierra en que hoy está enclavado el Grupo Escolar, y el parque y jardines “José María Hinojosa”, y cediera gratuitamente los 4.000 m2 que el Estado exigía….

El 8 de mayo de 1925, Federico Manzano ofreció gratuitamente 4.000 m2 de la parcela que había adquirido para el Ayuntamiento, para que este lo pusiera a disposición del Estado para la construcción del Grupo Escolar, con la única condición de que solo se dedique a dicho fin, y que se construya dentro de dos años. La donación del terreno se inscribió en escritura pública el 18 de mayo de 1925 (MISCELÁNEA – 345 y 352)

En un artículo escrito por Benito Luna y publicado el 16 de mayo en el periódico La Verdad de Antequera, hace un elogio de la labor realizada por Federico Manzano en pro del nuevo edificio para el colegio.

LA CONSTRUCCIÓN DE UN GRUPO ESCOLAR

En la sesión celebrada por la Comisión Permanente, el viernes ocho del actual (mayo), el señor Manzano Jiménez, dio cuenta de los trabajos que viene realizando con objeto de dotar a esta población de un grupo escolar, tan necesario y en el cual puedan instalarse dignamente las escuelas graduadas de niños y de niñas, mostrando su opinión de que en vista de las grandes dificultades de que por falta de consignación bastante en el presupuesto, habría de ofrecer la construcción directa por el Municipio, por lo cual, debía solicitarse el auxilio del Estado conforme a lo dispuesto en el R. D. de 17 de Diciembre de 1922 (aquí se equivoca en la fecha), ofreciendo a este, desde luego, la cooperación del Ayuntamiento con la aportación de la cantidad de quince mil pesetas consignada a este efecto en el presupuesto aprobado para 1925-26, y además aquellas otras aportaciones que pueda acordar la corporación en pleno para poder aspirar a las preferencias que en el mismo se establece.
En cuanto al solar, primer requisito necesario para la construcción, con el fin de que pueda ofrecerse al Estado íntegramente la cantidad presupuestada, el señor Manzano Jiménez ofreció ceder gratuitamente cuatro mil metros cuadrados, de una parcela adquirida por él recientemente para dicho objeto y con la única condición de que dicho solar sea destinado exclusivamente para la construcción del grupo escolar.
La Comisión en su vista, acordó aprobar en todas sus partes la propuesta del competente director de la graduada, aceptando tan generoso ofrecimiento y dándole las gracias, con la protesta de éste, que al ratificar su ofrecimiento hizo presente que lo hacía así únicamente en cumplimiento de su deber, en beneficio de éste su pueblo adoptivo y de la escuela en donde lleva prestados sus servicios hace ya más de treinta y cinco años, acordándose, por último, convocar al Pleno para ratificar estos acuerdos y la inmediata formación del oportuno expediente.
Es muy laudable la determinación de la Comisión Permanente de este Ayuntamiento, demostrativa del gran interés de la Corporación municipal en beneficio de este pueblo, y sobre todo la labor que en este sentido viene desarrollando nuestro buen amigo el señor Manzano. B. LUNA.
19250516 La Verdad (Antequera)

Hay que decir que un mes antes, el 17 de abril, Benito Luna Anoría, había presentado la dimisión de concejal en el ayuntamiento por incompatibilidad con el cargo de sustituto del Registrador de la Propiedad, que estaba ejerciendo.

También a nivel nacional, tuvo repercusión la donación de don Federico Manzano:

Generoso ofrecimiento. — Le ha hecho al Ayuntamiento el director de la Escuela graduada de Campillos, don Federico Manzano. Después de exponer en sesión celebrada los trabajos que viene realizando para dotar a aquella población de un Grupo escolar para niños y niñas, ofreció ceder gratuitamente un solar de 4.000 metros cuadrados con tal objeto, acordando la Comisión aprobar la propuesta y dar las gracias al generoso donante.

Digno de alabanza es el proceder de nuestro compañero señor Manzano.
19250520 Suplemento a la Escuela Moderna.

El 27 de agosto de 1925, la Corporación acordó solicitar al Director General de Enseñanza Primaria, vista la meritoria labor que durante más de 35 años viene desempeñando el edil D. Federico Manzano Jiménez, al frente a las Escuelas Graduadas y por su altruismo, que en Real Orden se le den las gracias y que a la vez, previa autorización, se denomine el nuevo Grupo Escolar “MANZANO JIMÉNEZ”. (MISCELÁNEA – 345)

Pasaban los meses, y la apetecida reforma de los problemas municipales no se llevaba a cabo. Las escuelas seguían instaladas en locales inadecuados, el mercado continuaba celebrándose al aire libre en la explanada de la plaza, la conducción de aguas se cortaba continuamente por la rotura de los antiguos atanores y alcubillas, y las calles apenas si podían atravesarse por los lodazales que se formaban con las lluvias. (BPH – 116)

Con respecto a la escuela, ya se tenía la parcela, pero faltaba el dinero, para lo cual, dos años más tarde de tener los terrenos, se aprobó en la sesión del 30 de junio de 1927, presidida por el alcalde D. Juan Gallegos Cuellar, un presupuesto extraordinario concertado con el Banco de Crédito Local de España, por un importe de 400.000 pesetas, con el fin de solucionar de una vez por todas, los problemas de infraestructuras que soportaba Campillos.

El desarrollo del citado presupuesto era el siguiente: 

Nuevo Cuartel de la Guardia Civil                                      22.500,00
Nueva traída de agua                                                       171.980,92
Construcción de una Plaza de Abastos                              74.459,39
Construcción de un Grupo Escolar                                     71.775,44
Construcción de un nuevo Cementerio                               56.825,39
Acerados y pavimentaciones                                                2.458,86

TOTAL                                                                               400.000,00 pesetas

Todas estas obras fueron proyectadas por el arquitecto madrileño Don José Joaquín González Edo.

Gracias a los esfuerzos de la corporación que presidió Juan Gallegos Cuellar, estas obras fueron llevadas a cabo en el transcurso de muy pocos años. Como dijo Baltasar Peña: Bien ingratamente supieron pagarle los campilleros, asesinándolo en el año 1936. La plaza de la Iglesia, que hoy lleva su nombre, constituirá para el mañana —sí se mantiene y es justo que así se haga —testimonio de gratitud para quien tan celosamente contribuyó a engrandecerla”.

Tres años después de la fundación de Unión Patriótica, el partido del gobierno, encontramos que en Campillos había arraigado fuertemente, con más de mil afiliados. Su directiva, eran los principales cargos municipales, con Federico Manzano Jiménez como jefe del partido:

MALAGA. —Con extraordinaria animación y entusiasmo se ha celebrado en Campillos, en su local social, la elección para el nombramiento de jefe local de la Unión Patriótica y de su Junta asesora.

Han tomado parte en la elección 1.055 afiliados al partido, y hecho el escrutinio han resultado elegidos por unanimidad los señores siguientes:
Jefe local, D. Federico Manzano Jiménez.
Vocales asesores: Don Antonio Palop Casasola, D. Juan Gallegos Cuellar y don Diego Durán Cuellar.
19270907 006 La Nación (Madrid)

SE APRUEBA LA CONSTRUCCIÓN DEL GRUPO ESCOLAR EN CAMPILLOS

Por fin, tres años y medio después de su planteamiento inicial, en la Gaceta del 25 de junio de 1928, se aprobó la construcción del Grupo Escolar. Tendría dos escuelas, una para niños y otra para niñas, con cinco secciones cada una.

A propuesta del Ministro de Instrucción pública y Bellas Artes, de acuerdo con Mi Consejo de Ministros y cumplidas las formalidades señaladas en los artículos…

Vengo a decretar lo siguiente:
Artículo 1º Se aprueba el proyecto redactado por la Oficina técnica de Construcción de Escuelas para construir un edificio de nueva planta con destino a dos Escuelas graduadas, una para niños y otra para niñas, con cinco Secciones cada una, en Campillos (Málaga), por un presupuesto de contrata de 358.877 pesetas con 19 céntimos.
Artículo 2º El mencionado edificio se construirá por el sistema de contrata y por la cantidad que se determina en el artículo anterior.
Artículo 3º La cantidad de 287.101 pesetas con 75 céntimos, que corresponde abonar al Estado, se satisfará con cargo…, fijándose 60.000 pesetas para el actual ejercicio económico, 100.000 pesetas para el de 1929 y 127.101 pesetas con 75 céntimos para el de 1930.
Artículo 4º La aportación que en metálico hace el Ayuntamiento de Campillos por el 20 por ciento del importe de las obras, que en principio asciende a 71.775 pesetas con 44 céntimos, será ingresada en la Caja general de Depósitos y remitido el oportuno resguardo al expresado ministerio, sin cuyo requisito no podrá ordenarse el comienzo de las obras.
Esta cantidad se abonará con la correspondiente a la del ejercicio económico de 1930.
Dado en Palacio a 25 de Junio de 1928
ALFONSO XIII
El Ministro de Instrucción pública y Bellas Artes
EDUARDO CALLEJO DE LA CUESTA
Gaceta de Madrid.- Núm. 178 – 26 de Junio de 1928 – Página. 1715

El 7 de enero de 1929, se adjudica según Real Orden de la Dirección General de Primera Enseñanza las obras del Grupo Escolar a D. Ángel Palacios Bernal en 320.118,45 pesetas. (MISCELÁNEA – 351)

Para que puedan empezar las obras, en el pleno del 18 de febrero de 1929, se encomendó al alcalde Juan Gallegos Cuellar, que realizara gestiones cerca del Banco de Crédito Local, para que se remita el importe del 20% sobre el presupuesto de 320.118 pesetas (64.023 pesetas) por el que se adjudicó el costo de la construcción del nuevo Grupo Escolar, junto con el resguardo, a la Dirección de Primera Enseñanza.

FIN DE LA DICTADURA

El general Primo de Rivera, ante la progresiva pérdida de apoyos sociales y políticos, a lo que se añadía que se estaba agravando la diabetes que padecía, presentó su dimisión al rey el 28 de enero de 1930, que le fue aceptada en el acto. Alfonso XIII, nombró al general Dámaso Berenguer, entonces jefe de la casa militar del rey, presidente del gobierno con el propósito de retornar a la normalidad constitucional.

El cambio de gobierno trajo un nuevo cambio en los ayuntamientos. En la Gaceta de Madrid del 17 de febrero de 1930, se publica un Real Decreto por el que el día 25 de ese mes "cesarán en sus funciones, finalizando su cometido, todos los Alcaldes, Tenientes de Alcalde y Concejales de los Ayuntamientos de la Nación, los cuales serán reemplazados por los que resulten designados con sujeción a las disposiciones de este Real decreto". 

El 21 de marzo de 1930, se posesionó de la alcaldía Antonio Avilés Fontalva, 41 años, vivía en la calle San Sebastián.


Foto tomada de "Miscelánea campillera" de Ildefonso Felguera

Una vez acabada la Dictadura, la clase obrera volvió a la calle. En el mes de junio, el nuevo alcalde, tuvo que enfrentarse a una huelga general de trabajadores del campo. La sequía del año anterior y la crisis del sector olivarero, habían conducido a un notable incremento del paro en Campillos.

La Sociedad de Obreros Agrícolas “1º de mayo”, presentó el 3 de mayo ante la clase patronal, unas nuevas bases de trabajo para la próxima recolección de cereales. Pedían la supresión de los destajos en la siega y en la recolección de cereales, un aumento del jornal y una disminución de la jornada, y que los obreros que sean admitidos al trabajo, sean individuos pertenecientes al Sindicato.

Después de algunas negociaciones, los obreros agrícolas, en vista de que los patronos no aceptaban las mejoras que pedían, a finales de mayo se declararon en huelga. Fue una huelga sin alteraciones del orden público.

Los patronos presentaron unas nuevas bases concediendo algunas mejoras en el jornal, pero manteniendo la jornada de trabajo que había. Los obreros tampoco aceptaron las nuevas bases formuladas por los patronos.

El domingo 1 de junio, el sindicato UGT, mandó a Campillos desde Montilla a Francisco Zafra Contreras, como delegado para mediar en la huelga de agricultores.

Campillos, 6.- Después de siete días de huelga, los obreros agrícolas han vuelto al trabajo. El conflicto se ha solucionado favorablemente mediante la intervención del compañero Zafra, de Montilla, en representación de la UGT.
Con tal motivo reina grandísimo entusiasmo entre la población obrera.
19300607 01 El Socialista
Después de una laboriosa gestación, ha quedado resuelto el conflicto obrero satisfactoriamente para ambas partes.
La oportuna intervención del delegado de la UGT, señor Zafra, llegando a ésta población el domingo, hizo que cambiara el aspecto de la lucha y que los trabajadores modificasen sus peticiones en el sentido de eliminar algunas de éstas, originarias de resistencias por parte de la clase patronal, y que ésta a su vez, y después de largas entrevistas cediera también, conviniéndose en su consecuencia, bases de trabajo para ésta recolección.
Hemos de hacer constar a fuer de imparciales espectadores, que en este conflicto no ha habido ni más, ni menos intransigencias que en otro cualquiera análogo, pudiendo asegurar que no ha habido, a pesar del número considerable de obreros en huelga, el menor motivo de intervención por parte de las autoridades, ni la más leve alteración de orden público.

La Unión Mercantil 19300607 005

La relación de la nueva corporación municipal con el anterior ayuntamiento, no debió ser muy cordial. Los anteriores estaban alineados con el partido Unión Patriótica, y los siguientes, aún siendo también monárquicos, eran constitucionalistas. Una de las pocas cosas que realizó la nueva corporación fue solicitar que el nombre del nuevo Grupo Escolar, que aún seguía en obras, fuera el de “REINA MARÍA CRISTINA”, la madre del rey, fallecida un año antes, el 6 de febrero de 1929. Con ello se revocaba el acuerdo de la anterior corporación que solicitó que se llamara “MANZANO JIMÉNEZ”.

SEÑOR:

El Estado, con la aportación del Ayuntamiento, construye en esta villa un Grupo Escolar de cinco grados para niños y otros cinco para niñas, encontrándose las obras muy adelantadas y, consiguientemente, próxima la fecha en que haya que tener efecto la entrega del edificio.
Es deseo, unánimemente sentido, de la Corporación Municipal que, por disposición del Gobierno de V. M. presido, de hacer llegar en todo momento a las Gradas del Trono, la adhesión inquebrantable a la monarquía y a la augusta persona de V. M., de todo el pueblo de Campillos; y poniendo el nombre de vuestra augusta Madre (q.e.p.d.) a este edificio escolar, verdadero palacio de la enseñanza, quisiera el Ayuntamiento y pueblo de Campillos, hacer patentes estos sentimientos y dedicar un recuerdo fervoroso a la Señora de virtudes excelsas, que todos los españoles lloramos.
Así pues, el Pleno de este Ayuntamiento, en acuerdo unánime y por mi conducto,
SUPLICA a V. M. se digne permitir que el edificio lleve, el titulo de GRUPO ESCOLAR REINA MARIA CRISTINA y que vuestro Ministro de Instrucción Pública y Bellas Artes, disponga sea fijado este nombre en la fachada del edificio.
Es gracia que el Ayuntamiento y pueblo de Campillos, espera alcanzar de V.M. cuya vida guarde Dios muchos años,
Campillos – Málaga - a dos de Julio de mil novecientos treinta.
Señor:
A.L.R.P. de V.M. (Traducido: A los Reales Pies de Vuestra Majestad)
Alonso Padilla Pérez

Desconozco el motivo por el que la carta la firma Alonso Padilla Pérez. Tenía por aquella fecha 43 años, vivía en la calle San Benito.

Era propietario, y no estaba afiliado a ningún partido político. Estaba casado con Encarnación García García, y era padre de cuatro hijos. Fue detenido el 24 de julio y asesinado el 15 de agosto de 1936, junto a veinte personas más.

 https://verdadhistoricacampillos.blogspot.com/2022/05/declaraciones-de-testigos-fc_14.html

La respuesta del mayordomo del rey, tres semanas después, se dirigió a Alonso Padilla, creyendo que era el alcalde de Campillos:


Señor Don Alonso Padilla Pérez.- Alcalde.- Presidente del Ayuntamiento de Campillos (Málaga)

Su Majestad el Rey (q.D.g. – traducido: que Dios guarde), se ha servido acceder con complacencia de Su parte a que sean designados con la denominación de "REINA MARIA CRISTINA", en memoria de Su Augusta y querida Madre (q.s.g.h.- traducido: que santa gloria haya), el Grupo Escolar, próximo a inaugurarse y que ha sido construido con aportación de ese Ayuntamiento en esa Villa.-
Lo que de Real Orden comunico a V. S. para su conocimiento, satisfacción y efectos consiguientes.-
Dios guarde a V. S. muchos años.-
Palacio 23 de Julio de 1930.-
Mayordomo Mayor de S.M. – Sr. Duque de Miranda

En la sesión del 29 de agosto, se dio lectura y quedaron enterados los señores concejales de la Real Orden comunicada por el Excmo. Mayordomo de S. M. mediante la cual se dispuso que el Grupo Escolar próximo a inaugurarse se denomine “REINA MARÍA CRISTINA” en memoria de la augusta madre de S.M. el Rey (q.d.g.). No hubo pronunciamiento ni comentarios. (MISCELÁNEA – 354)

COMIENZO DEL CURSO 1930 – 1931

Los maestros que en aquella fecha desempeñaban su trabajo en las escuelas nacionales de Campillos, eran:

MAESTROS.

D. Federico Manzano Jiménez, (63 años) Director de la Graduada desde el 17 de junio de 1916
D. Miguel Manzano Jiménez (54 años)
D. Rafael Núñez Núñez (34 años)
D. Federico Manzano Sancho (34 años)

MAESTRAS.

D.ª María F. Dérqui Godoy, (33 años) Directora de la Graduada desde el 4 de diciembre de 1926
D.ª Antonia Serra Arderius (33 años)
D.ª Francisca Valladores Martínez (42 años)
D.ª Encarnación Guerrero Moreno

El curso 1929 -1930 había finalizado, y la previsión era que el próximo comenzara ya en el nuevo Grupo Escolar. El 30 de junio de 1930, la directora de niñas Doña María F. Dérqui Godoy mandó una carta al alcalde de Campillos, Antonio Avilés Fontalva, en la que le comunicaba:

En contestación a su comunicación, fecha 28 de los corrientes, sobre clausura de esta Escuela Graduada de niñas de mi dirección, por haber cesado el contrato del inmueble en que estaba instalada, tengo el honor de participarle ha sido almacenado todo el mobiliario y material bajo inventario del que acompaño un duplicado y entrega de las llaves del local, con arreglo a las instrucciones que se me dan en su atta. comunicación.

Dios guarde a Vd. muchos años.
Campillos 30 junio 1930.
La directora.
María F. Dérqui

Por otra parte, el alcalde y el Director de la Graduada de niños, el 27 de mayo, mandan un escrito al ministerio en el que describen el presupuesto que para enseñanza tiene el municipio para ese año, y solicitan el material necesario para empezar el curso siguiente.


Sin embargo, el edificio del Grupo Escolar, que por contrato debía entregarse el 30 de junio de 1930, va retrasando su terminación. En septiembre debe empezar el curso, pero no hay edificio donde empezarlo.

El 4 de noviembre de 1930, nuevo cambio de alcalde, siendo nombrado Diego Moreno Layna. Por esa fecha tenía 34 años. Vivía en la calle San Benito. Estaba casado con Carmen Padilla Pérez. Tenían cinco hijos. Fue uno de los detenidos por los incidentes de finales de mayo de 1936.

Fue asesinado en Málaga el día 29 de septiembre de 1936. Fue detenido en el Hospital por un miembro del Comité de refugiados de Campillos, y otros dos más, y de allí lo llevaron al lugar donde fue asesinado.

https://verdadhistoricacampillos.blogspot.com/2022/05/declaraciones-de-testigos-fc_27.html 

Llega y pasa la navidad, y sin idea de cuándo va a iniciarse el curso. Falta la terminación y recepción oficial de la obra.

El 21 de febrero de 1931, en vísperas de la llegada de la Segunda República, la Inspectora provincial de 1ª Enseñanza, Sinforosa Vallejo Lara (1879), dirige una carta a Diego Moreno, alcalde de Campillos, en los siguientes términos:

En comunicado nº 37 de 17 de octubre del año anterior, rogaba a Vd. manifestase a esta Inspección, si la Escuela Nacional Graduada continúa clausurada, y si lo estaba, que hiciese cuantas gestiones estimase necesarias para su funcionamiento.

Como llegó diciembre sin haber recibido contestación alguna, hice diligencias privadas sobre el asunto, y por ellas juzgué que las clases se reanudarían en el nuevo año, al terminar las vacaciones de Pascuas, en el edificio construido por el Ayuntamiento de su digna presidencia, con la bonificación del Estado.
No me extrañó que en dicha fecha, quedase algún detalle que ultimar en el nuevo edificio y que la apertura de la Escuela se hubiese retrasado unos días. Pero próximo a su fin el mes de febrero y continuando clausurada la referida Escuela, sin conocimiento alguno de las causas que motivan el cierre de las cuatro secciones de que consta […], en cumplimiento de principios legales, me veo obligada a dar cuenta a la Dirección general de Primera enseñanza, del presente caso, sin que ello pueda suponer animosidad contra ese municipio de cuya celosa gestión y buen deseo espero información, y el funcionamiento de la repetida Graduada, en el más breve plazo posible, obviando cuantos obstáculos puedan oponerse a tan indispensable beneficio para los intereses de la cultura.
Dios guarde a Vd. muchos años
Málaga 21 de febrero de 1931
La Inspectora
Sinforosa Vallejo

Por su parte el alcalde D. Diego Moreno Layna, el día 27 de febrero, contesta a la Inspectora con el siguiente escrito.



La carta que va dirigida al ministro de Instrucción Pública, de la que hace referencia en el escrito anterior, va en los mismos términos.


14 DE ABRIL DE 1931. LLEGADA DE LA SEGUNDA REPÚBLICA

No me voy a extender en la llegada de la Segunda República a Campillos, ya que pienso en otra Crónica hablar de ello.

En lo referente al Grupo Escolar, la Segunda República vino a desatascar la situación de anomalía existente, y que después de tantos problemas para la puesta en funcionamiento de la escuela, una vez dotada de material y haberse nombrado el profesorado, por fin las clases empezaron el 18 de mayo de 1931, según la carta que le envía el Director de la graduada, don Federico Manzano Jiménez a la Comisión Gestora municipal, presidida por el socialista Juan Velasco Olmo. Posiblemente ese año no hubiera vacaciones de verano.


Federico Manzano Sancho, dice en su diario:

El Grupo Escolar se ha terminado de construir y se inaugura con el nombre de “Manzano Jiménez”. Es una delicia el trabajo en sus aulas de 10 x 6 metros, iluminadas por sus tres amplios ventanales y con habitaciones extras, lavabos y servicios en condiciones sanitarias. Tengo la satisfacción de haber pasado y enseñado en todos sus grados, y haberlo disfrutado durante 13 años.

Una vez constituida la nueva corporación municipal el 5 de junio de 1931, enteramente socialista, presidida por D. Cristóbal Barquero Reina, y con Benito Luna como concejal, se solucionó definitivamente el nombre del Grupo Escolar. En el pleno celebrado el 25 de julio de 1931:

Se lee un oficio del director de la Graduada de niños D. Federico Manzano Jiménez en el que expone que para la construcción del grupo escolar era necesario ofrecer al Estado los terrenos necesarios y como el Ayuntamiento no disponía de ellos, lo cedió gratuitamente dicho Sr., en su deseo de conseguir tan importante mejora para el pueblo, a lo que dedicó todos sus esfuerzos, consiguiendo al fin, después de innumerables sinsabores, lo que fue el sueño de toda su vida.

Dice que no habiéndose otorgado la escritura de los cuatro mil metros cuadrados de terrenos ocupados por el grupo, está dispuesto a efectuarlo cuando la Corporación resuelva.
El Sr. Luna pide la palabra y manifiesta seguidamente que la importante mejora del grupo escolar se debe a las gestiones del Sr. Manzano, en las que puso el mayor entusiasmo, llegando a ceder gratuitamente los terrenos, y el Ayuntamiento quiso demostrarle su gratitud poniendo su nombre al Edificio de las escuelas.
Posteriormente, otro ayuntamiento modificó el acuerdo y obtuvo una Real Orden sustituyendo el nombre del edificio con el de una persona de familia, entonces reinantes, lo que constituye una injusticia.
El Ayuntamiento, por unanimidad, acordó modificar el acuerdo de referencia, resolviendo que el grupo escolar lleve el nombre “MANZANO JIMÉNEZ”, que se exprese a dicho Sr. el agradecimiento de la Corporación y que por el Sr. Alcalde Presidente se otorgue la correspondiente escritura de la cesión de terrenos hecha por D. Federico Manzano Jiménez.

 

Finalizo con las palabras que dijo Baltasar Peña Hinojosa:

El Grupo Escolar orgullo de nuestro pueblo, y uno de los mejores de nuestra provincia, vino a resolver por completo el problema educativo, tan ampliamente, que aún abastece en nuestros días a las necesidades para que fue creado, a pesar del aumento de la población escolar. (BPH – 118)

Comentarios

Entradas populares de este blog

CAÑETE LA REAL, VERANO DEL 36

SIERRA DE YEGUAS, VERANO DEL 36

LA CANTINA ESCOLAR

JUAN MARÍA PÉREZ AVILÉS (1784-1845), CURA Y POLÍTICO. SEGUNDA PARTE

LA GUERRA DE INDEPENDENCIA EN CAMPILLOS. 18 DE MARZO DE 1810